Es importante saber cuáles posturas sexuales son las que mejor funcionan para ti porque cada persona es diferente
Las posturas sexuales más eficaces para llegar al orgasmo no siempre son las más obvias. De hecho, algunas de ellas son totalmente contrarias a la intuición.
Es importante que las parejas experimenten con diferentes posiciones hasta que encuentren la que mejor les funcione tanto en exclusiva como en conjunto. Si quieres convertirte en un mejor amante, debes conocer las diferentes posiciones sexuales que pueden ayudarte a alcanzar el orgasmo. Es importante saber cuáles son las que mejor funcionan para ti porque cada persona es diferente.
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Aquí están algunas de nuestras posiciones favoritas que hemos descubierto que pueden ayudarte a llegar más rápido:
1. El paseo del cangrejo: Esta es genial para los principiantes porque es un poco menos intensa que otras posiciones, ¡pero sigue haciendo el trabajo! Para realizar correctamente el cangrejo el hombre se debe sentar y estirar las piernas, mientras apoya las manos detrás de sus caderas. Su pareja, con los pies a los lados de sus caderas se sienta de espaldas sobre su pelvis y apoya sus manos en las piernas e introduce el pene en la vagina.
2. La vaquera invertida: Esta requiere un poco más de habilidad y flexibilidad que el paseo del cangrejo, ¡pero vale la pena! La mujer se coloca encima de su pareja; pero hay una diferencia: en lugar de mirar hacia su cara, mira hacia sus pies.
3. La cuchara que rebota: la pareja se echa de costado y, de espaldas, el hombre introduce el pene por la vagina de su pareja. Si se pega a la espalda de su acompañante, se percibe claramente la imagen de dos cucharas encajadas. El grado de penetración dependerá del ángulo formado entre el glúteo y la rodilla de la mujer, que podrá aumentarlo o disminuirlo a su antojo
4. La bicicleta sentada: Es ideal si tu pareja no es demasiado alta o baja. La mujer debe estirarse bocarriba en el borde de la cama o de otra superficie plana que quede a la altura de la cadera del hombre como, por ejemplo, una mesa. el hombre debe colocarse enfrente y tiene que levantar las piernas de su pareja y apoyarlas sobre su pecho.
Incluso, tomar los tobillos y controlar el movimiento de las piernas y el ángulo o bien, dejarle esta parte del movimiento a su pareja. La penetración debe comenzar despacio y delicadamente hasta que los dos encuentren el punto en que se sientan cómodos para acelerar el ritmo.
Si se quiere una penetración aún más profunda la mujer puede relajar los talones o los tobillos sobre los hombros de su acompañante. Este paso anterior permite que el hombre pueda acercarse más a su pareja para ofrecerle más estimulación y caricias en otras partes del cuerpo.
Si estás intentando llegar al orgasmo pero tienes problemas, hay algunas cosas que puedes hacer.
1. Practica la atención plena. Es una palabra de moda desde hace bastante tiempo, pero sigue siendo la mejor manera de reducir la velocidad y centrarse en lo que ocurre en el momento. Si no eres capaz de alcanzar el orgasmo, tómate un tiempo para meditar y despejar tu mente antes de empezar.
2. No te precipites. Éste es quizá uno de los mayores errores que comete la gente cuando intenta alcanzar el clímax: van demasiado rápido o prueban demasiadas posiciones diferentes en una sesión sin permitir que su cuerpo se aclimate a la sensación. En lugar de apresurarse, tómate tu tiempo y disfruta de cada posición tanto como sea posible antes de pasar a la siguiente (a menos que quieras tener varios orgasmos).
3. No te contengas. Cuando nos sentimos avergonzados o nerviosos por algo, tendemos a evitar estar realmente presentes en nuestro cuerpo, y eso puede dificultar que alcancemos el orgasmo durante el sexo con otra persona.
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