El hombre de 35 años quedó identificado como Luis Castillo y recibió diez disparos entre el pecho y la cara. Por las características del caso los sabuesos del Cicpc lo manejan como ajuste de cuentas o venganza.
La Cañada de Urdaneta — Por lo menos 10 proyectiles segaron la vida de un sujeto identificado como Luis Eduardo Castillo González, de 35 años, el hecho sangriento se suscitó en horas del mediodía del miércoles, en la avenida principal del sector La Goajira, en el minicipio La Cañada de Urdaneta.
Dos sicarios a bordo de una moto le dispararon cuando éste se desplazaba en otra motocicleta Empire, placas AA4C87W, de color negra y roja, propiedad de su hermano Carlos Castillo y que en horas de la mañana le había prestado para trasladarse durante el día a realizar sus diligencias. El hecho se registró justo frente al restaurante El Pescado de Gina donde a eso de las 12:30 los comensales corrieron despavoridos al escuchar las detonaciones.
Su esposa, Yusneida López contó que Castillo almorzó y salió de su vivienda, ubicada en el sector La Yaguasa con destino a la casa de su madre en La Ensenada y luego iría a pescar cangrejas, labor que, al parecer, realizaba desde hace algunos años.
Los sicarios huyeron del lugar sin dejar rastros. Según versiones de los lugareños los asesinos venían detrás de él y lo llamaron por su nombre, éste, al responder al llamado, hizo que los «tiradores» desenfundaran y dispararan sin piedad en el rostro y pecho.
El joven pescador era el segundo de tres hermanos y deja huérfanas a tres niñas de 3, 5 y 7 años, respectivamente.
La zona fue acordonada por comisiones del Cpbez, mientras que los sabuesos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), realizaban las experticias de rigor para determinar las causas de este hecho de sangre.
Otros familiares destacaron que el joven, quien apenas la semana pasada cumplió los 35 años, era de carácter tranquilo, pero muy alegre. Aseguraron desconocer los motivos por los cuales fue asesinado.
Una fuente policial reveló que por las características del asesinato se trata de un ajuste de cuentas o venganza, descartan el robo porque no le quitaron ninguna pertenencia. El cadáver fue trasladado a la morgue forense y hoy será velado en la vivienda materna.
Fotos: Carmen Salazar
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