Tíos de la pequeña se encontraban a las afueras de la morgue de LUZ a la espera del cadáver
Foto: Wilmer Cubillán
Presuntamente el padre de la menor tenía el arma en su casa debido a que maneja mucho dinero
Maracaibo — A las 7:30 de la noche del pasado viernes murió una niña tras dispararse con una pistola que presuntamente era de su padre.
Diomari Michelle Ocando La Cruz jugaba con su hermanito, de apenas 3 años de edad, en un cuarto de la vivienda donde residía con sus progenitores, ubicada en el barrio 28 de Diciembre cuando, al parecer, la niña sin tener conocimiento de armas ni mucho menos que esta estaba cargada se disparó en la cabeza, quedando malherida en el suelo de la habitación.
Los padres de la pequeña, quienes se encontraban en otra habitación descansando escucharon la detonación y salieron expeditos hasta donde se encontraban los niños, fue allí cuando vieron a su hija de tan solo 11 años de edad con herida de muerte.
Socorrida
Familiares de la menor la trasladaron hasta el ambulatorio El Silencio de allí fue remitida al Hospital General del Sur (HGS), donde los galenos de turno notificaron su muerte. La niña recibió un disparo en la parte trasera de la cabeza que, al parecer, le ocasionó un derrame interno que acabó con su vida al instante.
Diomari Ocando cursaba el 6to. grado de educación básica en la Unidad Educativa Celicio Acosta, y era la segunda de tres hermanos, uno de 3 años y otro de 14 éste último se encontraba afuera de su casa cuando ocurrió lo de su hermana.
Desesperación
Los padres de la niña fueron ingresados hasta la clínica Galué debido a una crisis nerviosa que sufrieron los dos tras la muerte de su pequeña.
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