Foto: alfredo Chinaleong
Maracaibo — La infraestructura del hospital que fue construida hace más de 20 años y luego invadida por un grupo de jóvenes, impidiendo su culminación, ubicada en el barrio Andrés Eloy Blanco, hoy en día es la vivienda de más de 10 familias que residen en el edificio.
Raúl Pons Lugo, habitante del lugar, denunció en este rotativo que desde que llegó con su familia al edificio no ha tenido servicio eléctrico, agua, cloacas ni gas doméstico; aunado a esto la delincuencia reina cada noche.
«Hemos ido varias veces a la Alcaldía de Maracaibo y a la Gobernación del estado Zulia para exigir que nos den una casa digna o que nos reubiquen en una de las casas que ellos hacen, pero nadie nos da respuesta, ya son 24 años que tenemos ahí, sufriendo cada día», denunció Pons Lugo.
Agregó que el edificio tiene 17 apartamentos, seis por cada piso, y en cada apartamento viven más de diez personas; la basura está alrededor de los hogares. El edificio se está cayendo a pedazos.
«Cada vez que llueve sufrimos por que el agua se mete por todos lados, además tenemos un solo poste para los dos bloques, eso ha causado cortocircuito varias veces, los niños son los que corren peligro por las conexiones de gas y electricidad de contrabando».
Pons Lugo denunció que un grupo de jóvenes practican ritos satánicos en un apartamento de los bloques.
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