La guerra de tuits entre Capriles y Diego Arria ha desatado polémica entre los mismos dirigentes de la Mesa, en la que la «Unidad» se fue de paseo. Así lo han manifestado diferentes sectores
Caracas — La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) atraviesa uno de los momentos más difíciles de su exitosa historia (que duró hasta el 8-D), luego de que los resultados electorales municipales no fueran como los de las presidenciales del 14 de abril, y fracasaran las intenciones opositoras de plebiscitar estos últimos comicios.
Las tensiones internas en el seno de la denominada MUD se agudizan debido a la proliferación de personajes «con posiciones políticas e ideológicas muy marcadas», destacó este domingo el periodista venezolano José Vicente Rangel.
«Para la Mesa de la Unidad Democrática el desafío consiste en elaborar un proyecto político que contemple una estrategia y una táctica, en función de un programa coherente de oferta de gobierno con capacidad para competir con el chavismo que tiene una amplia ventaja en esa materia», apuntó Rangel.
Asimismo, el analista político y profesor universitario, Luis Salamanca indicó el pasado sábado que en la instancia se vive un debate democrático. Dijo que la MUD debe activarse en la presentación «de un proyecto social nítido que se contraponga al plan oficialista y vincularse más con los que padecen los problemas del país».
Pese a esto, Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad manifestó ayer en rueda de prensa: «La MUD es una alianza muy amplia donde hay distintas posiciones, que siempre han logrado concretarse después en una política común, no hay una imposición. Lo que hay es una política común, que es el resultado de la discusión y el análisis del compromiso con el país».
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