No está claro si se celebraría una nueva reunión

Reunión entre funcionarios de Estados Unidos y Venezuela terminó sin acuerdos

funcionarios de estados unidos
7 de marzo, 2022 - 9:42 am
Agencias

Los funcionarios norteamericanos visitaron Venezuela este fin de semana en un giro inesperado en su postura hacia el gobierno del presodente  Nicolas Madura

 

Altos funcionarios estadounidenses viajaron a Venezuela para mantener conversaciones con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, buscando, presumiblemente, determinar si Caracas está dispuesta para distanciarse de su cercano aliado Rusia en medio de su invasión de Ucrania, lo que ademas permite suponer que el escenario ucraniano, lo le esta resultando muy favorable a los intereses económicos norteamericanos y europeos, y militares de la OTAN.

Algunos analistas también ven a Venezuela, sancionada por Estados Unidos, como una potencial fuente alternativa de suministro de petróleo en caso de que Washington intente restringir los envíos de energía de Moscú.

El viaje, la visita de más alto nivel de Estados Unidos integrada por,  según una fuente conocedora de ese nuevo viaje dijo a ABC este domingo,  el encargado de Iberoamérica en el Consejo Seguridad Nacional, Juan González, y el embajador de EE.UU. para Venezuela, James Story, que trabaja desde Colombia.

Estos funcionarios estadounidenses y los venezolanos mantuvieron una ronda de conversaciones el sábado pero no llegaron a ningún acuerdo, dijo otra a Reuters bajo condición de anonimato. No estaba claro si se celebraría una nueva reunión.

La visita, fue reportada por primera vez por el New York Times. La Casa Blanca y el Departamento de Estado no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios.

Lea También: Presidente Maduro se ofreció a vender el petróleo venezolano a Estados Unidos y Europa

El gobierno de Estados Unidos ha evitado en gran medida los contactos directos con el gobierno de Maduro en los últimos años. Los dos países rompieron relaciones diplomáticas en 2019 en medio de una campaña de sanciones estadounidenses y presión diplomática destinada a derrocar a Maduro

Vladímir Putin ha sido un aliado crucial del chavismo desde que Washington apoyara el cambio de régimen con la proclamación de Juan Guaidó como presidente encargado y el pronunciamiento fallido de 2019.

Con ocasión de la guerre en Ucrania, la Casa Blanca y el Capitolio gringo estudian un embargo al crudo ruso, y Venezuela es un gran productor de ese material, sujeto también a sanciones estadounidenses. Maduro ha defendido enardecidamente el supuesto derecho de Putin de invadir Ucrania repitiendo los argumentos del Kremlin.

Cuando EE.UU. dictó un embargo al crudo venezolano, por un tiempo Rosfnet, la petrolera rusa, se encargó de su distribución, hasta que la Administración Trump la sancionó parcialmente, y entonces desistió. Irán pasó después a entregar gasolina y demás combustible ya procesado al chavismo, ante la escasez energética.

La administración del ex presidente estadounidense Donald Trump y decenas de otros países consideraron que la reelección de Maduro en 2018 fue una farsa y, en su lugar, reconocieron al líder de la oposición Juan Guaidó como presidente legítimo del país.

Pero el presidente Maduro consolido la cercanía  con Rusia, China, Cuba e Irán.

La administración del presidente Joe Biden ha insistido en que no levantará las sanciones, incluidas las impuestas al vital sector petrolero de Venezuela, a menos que Maduro tome medidas concretas para celebrar elecciones libres.

Pero a ahora a Biden le preocupa que un embargo total al crudo ruso provoque un alza alarmante en los precios de la gasolina en EE. UU., y ha dicho que busca opciones para mitigar ese impacto. No pocas empresas petroleras y energéticas de EE.UU. se han visto perjudicadas por las sanciones a Venezuela, pues tenían importantes negocios de explotación en ese país. Hay en el Capitolio un grupo de legisladores que se oponen a este tipo de aperturas hacia el gobierno de Maduro, pero definitivamente las cosas en Europa no le están saliendo bien a la administracion Biden.

Marshall Billingshea, que fue subsecretario del Tesoro de EE.UU. encargado de actividades para combatir la financiación del terrorismo entre 2017 y 2021, cree que en ese viaje la delegación pudo haber ofrecido reconocimiento al gobierno de Maduro y eliminar las sanciones, si rompe con Putin, e incluso intercambiar a Alex Saab, por los directivos estadounidenses de Citgo detenidos por el chavismo. La Casa Blanca no ha confirmado esas afirmaciones.

Mientras que las exportaciones de petróleo de Venezuela han recibido un gran golpe, las empresas petroleras y los bancos rusos han desempeñado un papel clave para ayudar a Maduro y a la compañía petrolera estatal PDVSA a evadir las sanciones de Estados Unidos y continuar con los envíos.

Estados Unidos y sus aliados han recibido una creciente presión para castigar aún más a Rusia por su intervención  militar en Ucrania sancionando las exportaciones de petróleo y gas de Rusia, y la Casa Blanca ha dicho que todas las opciones siguen sobre la mesa.

Algunos comentaristas han sugerido que el alivio de las sanciones a Venezuela podría proporcionar una fuente alternativa de suministros energéticos globales.

El 25 de febrero, Venezuela culpó a Estados Unidos y a la OTAN de la crisis en Ucrania, aunque expresó su «preocupación por el agravamiento de la crisis» en ese país. Cuba y Nicaragua también han defendido la postura de Putin sobre Ucrania.

En una llamada telefónica del 1 de marzo, Putin y Maduro discutieron la situación en Ucrania y hablaron de aumentar una asociación estratégica entre Rusia y Venezuela, informó la agencia de noticias Interfax, citando al Kremlin.

Por el contrario el gobierno de EE. UU. ha evitado en gran medida los contactos directos con el gobierno de Nicolás  Maduro en los últimos años, tras la ruptura de relaciones de 2019. Donald Trump autorizó un contacto indirecto y secreto en México pero con duras condiciones para el chavismo, que no llegó a dar ningún resultado.

La Administración del presidente Biden ha insistido hasta ahora en que no levantará las sanciones, incluso en el sector petrolero, que es vital para Venezuela, a menos que Maduro tome medidas concretas para que en su país se den elecciones libres.

Biden no avisó a Guaidó de que enviaba una delegación a verse con el régimen de Maduro

Funcionarios norteamericanos han visitado Venezuela este fin de semana en un giro inesperado en su postura hacia el chavismo

El senador Rubio lamenta que el presidente de EE.UU. quiera reemplazar el crudo ruso por el venezolano, “un dictador por otro dictador”

Según la información del diario ABC  la Casa Blanca no avisó al gobierno interino de Venezuela que comanda Juan Guaidó ni a sus enviados en EE.UU., a los que en teoría reconoce como representantes legítimos del pueblo venezolano.

Recientemente, González, que es asesor de Biden para asuntos latinoamericanos, dijo en una entrevista a Voice of America que «las sanciones sobre Rusia son tan robustas que tendrán impacto sobre aquellos gobiernos que tienen afiliaciones económicas con Rusia y eso es por diseño, o sea que Venezuela va a comenzar a sentir esa presión».

El senador Rubio, gran defensor de Guaidó dijo que «Biden está usando a Rusia como una excusa para hacer el acuerdo que siempre quiso hacer de todos modos con Maduro». «En vez de producir más petróleo estadounidense quiere reemplazar el petróleo que le compramos a un dictador asesino con petróleo de otro dictador», ha dicho el senador Rubio en Twitter.

Mientras el gobierno de EE. UU. actuó a espalda del autoproclamado, el 5 de marzo, en la sesión del V Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela, los participantes, con Maduro a la cabeza, ofrecieron una ovación al embajador ruso, Sergéi Melik-Bagdasárov, quien dijo que Rusia está «con la resistencia junto con el pueblo y el Gobierno venezolano».

En una llamada telefónica el 1 de marzo, Putin y Maduro hablaron de la situación en Ucrania y sobre estrechar la alianza estratégica entre Rusia y Venezuela, informó la agencia de noticias Interfax, citando al Kremlin. Tras el apoyo de EE.UU. al pronunciamiento de los opositores en 2019, Rusia envió personal militar a Venezuela a calibrar un sistema de misiles que Hugo Chávez compró a Moscú, justo cuando el Gobierno de Trump amenazaba con el uso de la fuerza para deponer a Maduro.

NOTICIAS SUGERIDAS

Comente