El departamento del Tesoro de Estados Unidos ya ha aprobado sanciones directas al Estado venezolano, a miembros del gobierno de Maduro y otras sanciones secundarias a quienes negocien el crudo y otros productos
EE.UU.- Tras meses de dudas, altos funcionarios de la Casa Blanca, buscan aprobar, en días venideros, sanciones en contra Rusia. La clase dirigente de Washington, consultada por ABC Internacional, concuerda con que Rusia es el «último gran sostén de Nicolás Maduro» y que solo cortando los lazos económicos que se han establecido entre ambos países se facilitará la caída del gobierno venezolano.
«Los rusos pronto descubrirán que su continuo apoyo a Maduro ya no seguirá saliéndoles gratis. Otros que continúan beneficiándose o apoyando a Maduro deberían tomar sus precauciones. Y, en general, verán que en las próximas semanas anunciamos medidas que que demuestran la seriedad de nuestras intenciones en Venezuela», advirtió el representante especial de EE.UU. para la crisis venezolana, Elliott Abrams.
Según reseña ABC Internacional, Rusia prometió invertir 5.000 millones en la extracción de crudo y 1.000 millones en la minería del oro y los diamantes de Venezuela, por lo que Rosnet, empresa petrolera pública de Rusa con negocios en el país latinoaméricano, se encuentra en la mirilla de las sanciones.
«Según estimaciones del Gobierno norteamericano, esa compañía rusa ya distribuye dos tercios del crudo que extrae el régimen que, por medio de un despacho en Panamá, acaba sobre todo en India y China. Rusia cobra también comisiones por la distribución, en un negocio redondo», agrega el medio de internacional.
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El «oro de sangre», como se ha calificado la producción minera de Venezuela, se distribuye en Emiratos árabes Unidos, Uganda y Turquia, rebeló una investigación de Runrunes.
El departamento del Tesoro de Estados Unidos ya ha aprobado sanciones directas al Estado venezolano, a miembros del gobierno de Maduro y otras sanciones secundarias a quienes negocien el crudo y otros productos que beneficien a la cúpula chavista.
Foto: Cortesía
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