Países adheridos al acuerdo han mostrado su disposición a cooperar en la estabilidad del mercado
Foto: Agencias
Caracas – Durante los primeros días del año, los precios del crudo internacional han respondido favorablemente, luego de haberse activado el acuerdo de recorte y pese a la instalación de nuevos taladros para extracción en Estados Unidos.
La reacción alcista está enmarcada en la disposición de las naciones adheridas al recorte de cumplirlo. Ayer el sultanato de Omán confirmó que reducirá sus niveles de producción en unos 45 mil barriles diarios, según lo establecido en el acuerdo de Viena.
De acuerdo a un comunicado del Ministerio de Petróleo y Gas de Omán, esta nación independiente a la OPEP «ha dado la orden para la reducción», con la que su generación diaria se ubicará en torno a los 970 mil barriles diarios.
Ali bin Abdala al Riami, director general de comercialización del Ministerio de Petróleo omaní, expresó a la televisión estatal que «la reducción de la producción era necesaria para favorecer el aumento del combustible en el futuro», por lo que «Gobierno y Ministerio decidieron que 45 mil barriles diarios podía ser la contribución adecuada del sultanato».
También, al inicio de esta semana Arabia Saudita apeló a la cooperación de los países productores integrantes del acuerdo, para lograr la estabilidad del mercado.
El Consejo de Ministros saudí destacó la importancia «de la estabilidad y la coordinación y de incrementar la cooperación entre los Estados miembros y el compromiso para implementar el acuerdo».
Arabia Saudita contiene uno de los principales recortes dentro del acuerdo, que cifra en 486 mil barriles.
Una evidencia de estas posturas, se visualiza en el comportamiento de los marcadores internacionales durante la primera jornada de cotización de este martes. El barril de crudo Brent, referencia europea, abrió al alza a 57,15 dólares, un ascenso del 0,58%. Por su parte, el precio del petróleo del West Texas Intermediate (WTI), arrancó con una ganancia de 1,36 dólares, para ubicarse en 55,08 dólares.
Hacia el cierre, los precios fueron conducidos a una ligera baja, sobre todo por la postura de Estados Unidos y rumores de incremento productivo dentro de la OPEP.
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