Se teme que la altura alcanzada por los gases tóxicos y cenizas vuelvan a dejar inoperativo el aeropuerto.
En La Palma, España, el volcán Cumbre Vieja sigue causando destrozos. Varias casas ardieron cuando fueron alcanzadas por ríos de lava.
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Además, la altura que alcanzan los gases y la ceniza ha llegado hasta los 4 mil metros y al menos, en las próximas 72 horas, su posición puede afectar las operaciones en el aeropuerto de La Palma como ocurrió la semana pasada cuando quedó inoperativo.
Hasta 3.000 residentes de la isla española recibieron el lunes la orden de confinarse después de que la lava destruyera una fábrica de cemento, lo que generó nuevos temores de gases tóxicos.
El volcán La Cumbre Vieja comenzó a entrar en erupción el 19 de septiembre, lo que obligó a 6.000 personas a abandonar sus hogares mientras la lava se abría paso a través de 600 hectáreas de tierra.
El pasado sábado, parte del cono del volcán se derrumbó enviando nuevos ríos de lava que caían por las laderas hacia una zona industrial.
Los vuelos a la isla se reanudaron ese mismo día después de 48 horas de espera debido a la ceniza que salió del volcán.
Sin fallecidos en La Palma
A pesar de los daños causados por la erupción (más de 1.200 edificios han sido destruidos, dicen los funcionarios locales), hasta ahora no ha resultado nadie muerto o herido en el desastre.
Se trata de la tercera erupción volcánica en la isla de La Palma, hogar de 85.000 personas, en un siglo, aunque la última se remonta a 1971.
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