Una ola de declaraciones de dirigentes opositores, oficialistas y otros sectores; la declaración sorpresiva de la fiscal general, convocatorias a marchas, acciones legales contra los magistrados del Poder Judicial y comunicados de países de todo el mundo, son parte del panorama que vive Venezuela tras la sentencia de la Sala Constitucional que cede al presidente Nicolás Maduro las obligaciones del Poder Legislativo
Foto: Agencias
Henry Ramos Allup, expresidente de la Asamblea: «La declaraciones de la Doctora Ortega Díaz significan un paso adelante de una institución que no quiere prestarse a las violaciones de la constitución. Exactamente a eso apuntamos, a que no se persiga a nadie por sus ideas».
Leopoldo López, dirigente de Voluntad Popular desde Ramo Verde: «Hoy, a través de una sentencia ilegal e ilegítima, el TSJ decretó formalmente la DICTADURA que desde 2014 hemos denunciando en Venezuela (…) Momentos definitorios en los que debemos elegir si estamos a favor de la democracia o de la dictadura».
Julio Borges, presidente de la Asamblea: «Lo dejamos en claro; lo que sucede hoy en el país es un Golpe de Estado, un mero ejemplo de la dictadura que vivimos (…) El problema de Venezuela se ha convertido en una enfermedad contagiosa para toda la región».
María Corina Machado, coordinadora de Vente Venezuela: «Ciudadanos militares, hasta la fiscal lo reconoce. Corresponde a ustedes pronunciarse: dictadura o democracia, con el régimen o con la Constitución».
Eduardo Vale, concejal de Maracaibo: «Exhortamos a todos los poderes públicos y la misma FANB a ponerse del lado de los más de 15 millones de venezolanos que eligieron a la AN y hoy el Gobierno y el TSJ pretenden destruir».
Leonardo Fernández, concejal de Maracaibo: «La democracia en Venezuela está siendo desangrada a cuchillo limpio por quienes están en el poder. Están jugando con fuego».
Aristóbulo Istúriz, ministro para las comunas: «El presidente Nicolás Maduro tienen las atribuciones para que el pueblo tenga protección (…) El TSJ no está dando ningún golpe de Estado, la AN sí dio un golpe de estado cuando dijeron que el Presidente tenía un abandono de cargo con Maduro en Miraflores».
Pedro Carreño, diputado por el PSUV: «QUE AUTOGOLPE TAN EXTRAÑO HAY EN VENEZUELA. Si la AN acata sentencias del TSJ entra en legalidad y vuelve a sus funciones».
Francisco Arias Cárdenas, gobernador del Zulia: «La AN debe revisar las razones del TSJ, cumplir con los pasos que han violado, ponerse a derecho para legislar y controlar».
Víctor Clark, diputado por el Gran Polo Patriótico: «Debemos de conocer el contexto donde reposa la sentencia(…) estamos respondiendo a un parlamento en desacato. Tenemos que apostar por el trabajo de la economía y evitar promover hechos de violencia”.
Jacqueline Faría, dirigente nacional del PSUV: «El TSJ es el poder supremo tal como lo dice su nombre, control y administración del uso de la Constitución, el TSJ venía supliendo todas la fallas de la Asamblea Nacional (…) El gobierno se mantiene organizado para “no dejar caer el país en una cantidad de eventos violentos como las ‘guarimbas’, nosotros no lo vamos a permitir, nuestro presidente Maduro está preparado para hacerle frente a esta intentona».
José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente de España: «Por mis tareas de Gobierno y por mi experiencia en responsabilidades políticas sé que cuestiones tan delicadas en un escenario de conflicto solo pueden tener una vía de solución con trabajo de discreción y paciencia».
Otros sectores también levantaron la voz
Consejo Universitario de LUZ: «El fallo de la sala del TSJ introduce un peligroso y destructivo virus en el sistema político venezolano al tipificar el delito de traición a la patria para los diputados que exigen la aplicación de un ordenamiento jurídico ante la ruptura del hilo constitucional. El CU de LUZ condena de modo firme los actos abusivos del TSJ y rechaza la represión de todos los venezolanos».
Colegio Nacional de Periodiastas (CNP)-Zulia: «La decisión del TSJ presta un flaco servicio a los intereses de un país inmerso en una profunda crisis; donde el ciudadano común hace esfuerzos para sobrevivir».
Comisión interamericana de derechos humanos (CIDH): «Estas nuevas decisiones constituyen una usurpación de las funciones del Poder Legislativo por parte de los Poderes Judicial y Ejecutivo, así como una anulación de facto del voto popular mediante el cual fueron elegidos los diputados de la Asamblea Nacional».
Conferencia Episcopal Venezolana (CEV): «Una nación sin parlamento es como un cuerpo sin alma. Está muerto y desaparece toda posibilidad de opinión divergente o contraria a quienes están en el poder. Se abre la puerta a la arbitrariedad, la corrupción y la persecución, un despeñadero hacia la dictadura».
Comente