Exige que la gigante de Mountain View deje de pagar a sus socios por un trato preferente de su motor de búsqueda

Estados Unidos insiste en que Google debe vender Chrome

Google
11 de marzo, 2025 - 3:44 pm
Agencias

«A través de su enorme tamaño y su poder ilimitado, Google ha despojado a los consumidores y a las empresas de una promesa fundamental que se le debe al público: el derecho a elegir entre servicios competidores», reza el comunicado de el Departamento de Justicia de EE. UU.

 

El Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ, por sus siglas en inglés) quiere que Google venda su navegador como parte de la resolución al caso de antimonopolio histórico. La propuesta indica que Chrome debe «desprenderse rápida y completamente de la compañía, junto con los activos o servicios necesarios para completar con éxito la desinversión a un comprador aprobado, sujeto a los términos que el Tribunal y los demandantes aprueben».

También exige que la gigante de Mountain View deje de pagar a sus socios por un trato preferente de su motor de búsqueda.

Lea También: Trump dijo que hay 4 grupos interesados en TikTok y no descarta un acuerdo pronto

De igual forma, Google debería notificar al DOJ sobre cualquier nueva colaboración o asociación con cualquier empresa que compita con ella en la búsqueda o en los anuncios de texto de búsqueda. No obstante, la compañía ya no tendrá que desprenderse de sus inversiones en inteligencia artificial, lo que formaba parte de un conjunto inicial de recomendaciones emitidas por los demandantes en noviembre pasado. Pero su obligación de notificar futuras inversiones en IA continuará.

«A través de su enorme tamaño y su poder ilimitado, Google ha despojado a los consumidores y a las empresas de una promesa fundamental que se le debe al público: el derecho a elegir entre servicios competidores», reza el comunicado del DOJ que acompaña a la presentación.

Señala que «la conducta ilegal de Google ha creado un gigante económico que causa estragos en el mercado para garantizar que, pase lo que pase, siempre gane».

El DOJ demandó a Google en 2020

Este fue el caso de antimonopolio tecnológico más importante desde la larga batalla del DOJ contra Microsoft en la década de 1990. La demanda alegaba que Google utilizaba tácticas anticompetitivas para proteger su dominio de las búsquedas y forjar contratos que le aseguran ser el motor de búsqueda predeterminado en los navegadores web y los smartphones. Gracias a su dominio de las búsquedas, Google puede ajustar el sistema de subastas a través del cual vende anuncios y aumentar los precios para los anunciantes, con lo que obtiene más ingresos.

Google ha argumentado que su éxito en las búsquedas, el casi 90% de la cuenta total del mercado estadounidense, se debe a que ofrece la mejor tecnología de búsqueda. También refiere que los consumidores pueden cambiar fácilmente su motor de búsqueda predeterminado y que Google se enfrenta a la competencia de Microsoft y otros.

«Las propuestas del DOJ van más allá de la decisión del tribunal y perjudicarían a los consumidores, a la economía y a la seguridad nacional de Estados Unidos», declaró el portavoz de Google Peter Schottenfels, en un comunicado enviado por correo electrónico a WIRED.

Googlebv

El caso llegó a juicio en 2023, y en agosto de 2024 el juez de distrito estadounidense del Distrito de Columbia, Amit Mehta, dictaminó que Google ha mantenido un monopolio ilegal, tanto en la búsqueda web como en los anuncios de texto de búsqueda general.

Gran parte de la sentencia se centraba en los contratos que Google tiene con fabricantes de dispositivos y navegadores asociados, que utilizan Google como tecnología de búsqueda predeterminada. Según la sentencia de Mehta, alrededor del 70% de las consultas de búsqueda en EE. UU. se realizan a través de portales en los que Google es el motor de búsqueda predeterminado.

«La compañía comparte los ingresos con esos socios, pagándoles miles de millones de dólares, lo que desincentiva a los rivales más pequeños que no pueden competir con esos contratos», esclareció Mehta.

Hay una opción: Decirle adiós a Chrome

El pasado mes de noviembre, los abogados del gobierno presentaron a Mehta un plan detallado que incluía una serie de recomendaciones sobre la mejor manera de reducir el dominio de Google en el mercado de búsquedas estadounidense.

Las recomendaciones incluían la separación de Chrome, que se desprendiera de Android y pusiera fin a su asociación de búsqueda con Apple, en la que Apple recibe miles de millones de dólares cada año para que su navegador Safari utilice por defecto la búsqueda de Google. Otro punto es que los competidores accedieran libremente a los datos de la gigante, tanto para la búsqueda como para los anuncios, «que proporcionan a Google una ventaja continua por su conducta excluyente».

Kent Walker, presidente de asuntos globales de Google y su director jurídico, calificó la propuesta de noviembre de «programa intervencionista radical» que «pondría en peligro la seguridad y la privacidad de millones de estadounidenses» y ahogaría la innovación.

Walker afirmó que también «enfriaría la inversión en inteligencia artificial, quizá la innovación más importante en la que Google desempeña un papel destacado». La big tech cada vez ofrece más resultados basados en IA en la parte superior de sus páginas de búsqueda, a pesar de que a veces los resultados son desiguales.

Hay una opción: Decirle adiós a Chrome

El pasado mes de noviembre, los abogados del gobierno presentaron a Mehta un plan detallado que incluía una serie de recomendaciones sobre la mejor manera de reducir el dominio de Google en el mercado de búsquedas estadounidense. Las recomendaciones incluían la separación de Chrome, que se desprendiera de Android y pusiera fin a su asociación de búsqueda con Apple, en la que Apple recibe miles de millones de dólares cada año para que su navegador Safari utilice por defecto la búsqueda de Google.

Otro punto es que los competidores accedieran libremente a los datos de la gigante, tanto para la búsqueda como para los anuncios, «que proporcionan a Google una ventaja continua por su conducta excluyente».

Kent Walker, presidente de asuntos globales de Google y su director jurídico, calificó la propuesta de noviembre de «programa intervencionista radical» que «pondría en peligro la seguridad y la privacidad de millones de estadounidenses» y ahogaría la innovación.

google

Walker afirmó que también «enfriaría la inversión en inteligencia artificial, quizá la innovación más importante en la que Google desempeña un papel destacado». La big tech cada vez ofrece más resultados basados en IA en la parte superior de sus páginas de búsqueda, a pesar de que a veces los resultados son desiguales.

En una contrapropuesta presentada por Google en diciembre, la compañía explicó que estructuraría sus contratos para permitir múltiples acuerdos de búsqueda por defecto a través de diferentes dispositivos, de modo que los dispositivos de Apple pudieran tener diferentes motores de búsqueda por defecto; cambiar la duración de sus acuerdos de ingresos de búsqueda con los fabricantes de hardware a un año en lugar de encerrarlos en acuerdos a largo plazo; y permitir una mayor flexibilidad en torno a la búsqueda y Chrome para los fabricantes de teléfonos Android.

También subrayó que sus socios de ingresos, como Apple y Mozilla, «tienen la libertad de llegar a acuerdos con el motor de búsqueda que consideren mejor para sus usuarios».

Google tendrá que negociar

Aunque Google está dispuesta a reevaluar sus contratos con socios, cita casos antimonopolio anteriores en los que no fue necesario desprenderse de parte de su negocio, compartir la «receta secreta» con sus competidores ni restringir sus inversiones en búsqueda de IA. Su argumento es que esto frenaría la innovación.

El remedio oficial de hoy es notable en el sentido de que refuerza los llamamientos a la separación de parte de la actividad principal de Google. Para Google, es la primera salva de lo que probablemente será un proceso de apelación que durará años. Google ya manifestó su intención de recurrir cualquier medida que se adopte; los alegatos sobre las dos propuestas están previstos para abril en el tribunal de Mehta.

El remedio también marcará el primer resultado importante de un caso antimonopolio estadounidense bajo la nueva administración Trump. Paul Swanson, socio de litigios de Holland & Hart LLP en Denver, Colorado, que se centra en tecnología y antimonopolio, indica que los remedios del gobierno pueden ser parte de una «posición de apertura maximalista desde la que luego pueden negociar».

Swanson subraya que el único hilo conductor es que esta administración quiera ser percibida como «dura con la tecnología», pero sin frenar el crecimiento de la industria en EE. UU.: «En última instancia, puede que den señales de actuar más de lo que realmente quieren».

Comente