Los dos delincuentes le dieron un disparo y se marcharon con su celular y la billetera de su primo.
El hampa cobra otra vida
Maracaibo — El hampa cobra otra vida inocente. La delincuencia se ha dado a la tarea de no conformarse con robar lo que con esfuerzo sus dueños adquieren, en esta oportunidad hasta se llevaron consigo lo más preciado de un ser humano: la vida.
El hecho ocurrió en la avenida 14A con calle 72, específicamente al lado del local de comida Qué Pinchos a las 10:30 de la noche del lunes. La víctima quedó identificada como Esdrubal Alejandro Villanueva Guerra (25), un muchacho que laboraba haciendo transporte para PDVSA.
Lo que se suponía debió ser una celebración terminó en tragedia, Villanueva se encontraba feliz por la llegada al mundo de una nueva sobrina, quien había nacido el pasado 6 de enero y la llegada de su padre desde Houston y su hermano desde Canadá hace dos días. Para festejar la unión familiar, decidieron celebrarlo en el referido local de comida. «Estábamos mi hijo Esdrubal, yo, tres primos y mis otros hijos. Todo ocurrió en un abrir y cerrar de ojos», recordó Édgar Villanueva, padre del infortunado, visiblemente afectado.
Las ocho personas llegaron al lugar y realizaron el pedido sentándose en la parte de arriba del local.
Esdrubal, en compañía de uno de sus primos, bajó y se dirigió hasta su carro el cual había estacionado en frente de la farmacia Saas, ubicado a escasos metros del lugar, puesto que era el único espacio para estacionarlo.
«Dame el celular y la tablet»
Al llegar al vehículo, fueron sorprendidos por dos sujetos a bordo de un carro pequeño, de color gris, quienes apuntando a los primos le exigieron a Esdrubal entregar su Samsung S4 y la tablet.
Édgar Villanueva aseguró que su hijo solo tenía en su poder el móvil y las llaves del carro las cuales lanzó hacia el suelo.
Uno de los delincuentes sometió al primo sosteniéndole las manos, mientras que el otro apuntaba a Villanueva, quien decidió darle un golpe al hampón.
Esto desencadenó la furia del «choro», quien sacó su arma y le propinó un tiro en el brazo, recorrió el intercostal izquierdo y terminó afectando órganos vitales.
Angustia y desesperación
Rápidamente fue trasladado hasta el Hospital Universitario, pero lamentablemente perdió la vida a las 4:00 de la mañana. Trascendió que el hoy occiso llevaba dos años laborando para la empresa petrolera, no deja hijos y no estaba casado. Era el tercero de tres hermanos. Su novia, Jennifer Toledo, se encontraba devastada con la noticia. No pronunciaba palabra. Residía en la urbanización San Felipe de San Francisco y será velado en el sector Paraíso en casa de su familia materna.
El suceso fue capturado por dos cámaras de seguridad de la farmacia, lo que servirá como evidencia para dar con los responsables.
Édgar Villanueva, padre de la víctima, manifestó que su hijo estaba contento por su llegada y la de sus hermanos
Fotos: Gabriela Sanz
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