Foto: Ana Romero
Familiares de Handry Henríquez hicieron su propio levantamiento del cuerpo y amanecieron con el cadáver dentro de un carro.
Maracaibo — El cadáver de Handry José Henríquez Sánchez, de 21 años, recorrió clínicas, hospitales y finalmente la morgue de LUZ, dentro de un vehículo marca Chevrolet, modelo Caprice, de color vino tinto, perteneciente a un allegado, que lo encontró arrollado a las dos de la madrugada de este lunes, en la calle 71 con avenida 103 del barrio Carmelo Urdaneta, parroquia Venancio Pulgar.
El infortunado fue impactado mortalmente por un vehículo, del cual se desconocen las características. El amigo que pasaba por el lugar se percató que se trataba de Handry, y lo llevó hasta la clínica Vera, donde fue negado su acceso, «porque ya estaba muerto»; luego lo llevaron al Hospital Universitario de Maracaibo, dispensario en el que obtuvieron la misma respuesta, hasta que decidieron amanecer con el cuerpo, dentro del automóvil frente a la morgue, esperando la llegada del personal forense.
Unas 50 personas se conglomeraron alrededor del carro; familiares, amigos y compañeros de la línea de autobuses Ruta 6 —donde laboraba como chofer— estuvieron presentes.
«Él salió desde las cuatro de la tarde, para celebrar el Día de las Madres con la familia de su novia, pero no supimos nada de él, hasta que nos avisaron que estaba muerto», informó su padre, Henry Henríquez, quien en medio de su pesar además gritaba «¡si no me lo aceptan aquí (la morgue), que hablen claro y me lo llevo para mi casa!».
Finalmente tras las gestiones legales necesarias, el cuerpo ingresó a la morgue para la necropsia de ley. El infortunado era el menor de tres hermanos.
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