Maracaibo — Rosmery Guerra, tía del pequeño que murió «accidentalmente» el pasado domingo a las 7:00 de la noche, por su hermano morocho de 9 años de edad, manifestó que «la escopeta estaba debajo del colchón de la cama de sus padres».
Visiblemente consternada, la mujer dijo que los muchachos quedaron solos cuando los padres de los niños salieron a comprar agua; al llegar se encontraron con la triste escena. La familia vive en la granja donde se dedican a la cría de cochino, en el sector Súper S, kilómetro 18 de la vía a Perijá.
El pequeño falleció de inmediato, víctima de las balas que recibió en el pecho. El cuerpo del infante es velado en el sector Curarire del municipio La Cañada de Urdaneta.
En la morgue de la Facultad de Medicina de LUZ se encontraba la madre del pequeño y su otro hijo, en medio de un mar de lágrimas, y no ofreció declaraciones a los medios. Se espera la versión de las autoridades al respecto.
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