El descuido ha cobrado la vida de cinco menores

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19 de febrero, 2014 - 3:36 pm
Redacción Diario Qué Pasa

Frank de Jesús Miquilena González (9) murió calcinado dentro de su vivienda ubicada en el barrio Antonio José de Sucre.

Descuidos e imprudencias de sus padres y/o representantes, travesuras sin límites e inconsciencia, han sido los principales motivos por los que cuatro infantes y un adolescente de 16 años perdieron la vida durante los primeros casi dos meses que han transcurrido de este 2014.

El primer hecho que estremeció la comunidad zuliana y por el que aún se derraman lágrimas de sufrimiento por parte de familiares y vecinos, ocurrió la tarde del pasado 4 de febrero, cuando el pequeño Frank de Jesús Miquilena González de apenas 9 añitos, murió calcinado dentro de su vivienda, ubicada en la calle 86B, con avenida 116A, del barrio Antonio José de Sucre, tras la imprudencia cometida por su abuela, al salir a hacer unas diligencias y dejar encerrado al menor.

Un posible cortocircuito pudo generar el incendio que acabó con la vida de «Franki», quien fue consumido por las llamas al no poder salir de la casa y tampoco pudo ser socorrido por sus vecinos. Según declaraciones de su abuela, Celia Miquilena (61), con quien vivía desde hace más de cinco años, luego que la madre del menor rehiciera su vida en la ciudad capital y solo viera a su hijo esporádicamente, el pequeño era muy travieso y presentaba problemas de conducta. «Por eso lo dejé encerrado».

Vecinos del sector aseguraron que la sexagenaria llegó a maltratar a su nieto en varias oportunidades. La fiscal 33° del Ministerio Público con competencia de menores, Marlene Fernández lleva el caso.

La segunda tragedia, tuvo lugar en el barrio Sabana Grande, el pasado 11  de febrero a las 2:00 de la tarde, cuando Elías Josué Núñez Bravo de 23 meses de nacido, en un descuido de su madre, quien reprendía a su hermanita de ocho años por jugar con fuego,  en medio de su inocencia, cayó en un balde de agua que se encontraba en el baño de la casa ubicada en la avenida 60 de la referida barriada. Desafortunadamente,  el pequeño murió por inmersión, su cuerpecito fue sepultado entre lágrimas de impotencia y una profunda desesperación.

No había transcurrido 24 horas, cuando bajo circunstancias casi iguales al deceso del infante, murió ahogado Yerickson David Petit Gómez (4). Según narró Yesenia Gómez, madre del niño, el pequeño le pidió galletas para la cena y la fémina salió a la tienda, a escazas cuadras de la residencia de dos pisos ubicada en el sector El Pinar y dejó a su hijo en compañía de su hermana de 6 años.

Cuando regresó, encontró a Yerickson hundido de cabeza en un tobo de agua que estaba dentro del baño de la vivienda. Fue trasladado hasta el CDI del sector y minutos después fue comunicada su muerte.

La cuarta muerte fue la de un adolescente de 16 años, identificado como Luilly Albert Alarcón Navarro, quien fue hallado sin vida el pasado 12 de febrero. El joven salió a pescar en compañía de su tío, primo y un amigo, al muelle de la Cervecería Regional, cuando se lanzaron al Lago y  al parecer, Luilly se fue alejando desapareciendo segundos después.

La corriente le hizo una mala jugada y fue arrastrado, su cuerpo sin vida fue hallado a las 7:00 de la noche del día siguiente, tras una intensa búsqueda realizada por efectivos de Protección Civil, 13 Bomberos de Maracaibo, Guardia Costera, Funcionarios del Instituto Nacional de Espacios Acuáticos (Inea) y Cpbez.

El último deceso que ha cobrado este año hasta la fecha, fue el de la pequeña Amelia Josefina Urdaneta Epinayú (10), quien falleció en un descuido de sus padres, cuando estos fueron a buscar yuca para el desayuno, tres niños decidieron jugar en un árbol al columpio. Un mecate sirvió como entretenimiento para los pequeños, hasta que desgraciadamente Amelia se ahorcó ante la mirada inocente de sus dos hermanitos.

El hecho ocurrió a las 8:00 de la mañana del 13 de febrero en el patio de su humilde vivienda, signada con el #142-469 del barrio San Sebastián, parroquia San Isidro.

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Elías Josué Núñez Bravo de 23 meses, fue el primer infante que murió por inmersión en lo que va de 2014.

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Lo que parecía un juego finalizó en desgracia, Amelia Josefina Urdaneta Epinayú (10) murió ahorcada accidentalmente.

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Luilly Albert Alarcón Navarro (16) fue hallado sin vida a las 7:00 p.m. en las aguas del Lago, detrás de la Cervecería Regional.

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