San Francisco — Toda una vida tenía Ezequiel Antonio Cano Barrero (56), viviendo en la calle 19 con avenida 6 del sector El Perú, en el municipio San Francisco. La fatalidad lo sorprendió el día domingo, pero no fue hasta el martes que su cuerpo fue encontrado por vecinos del sector, quienes al no verlo por los alrededores y por el fuerte olor putrefacto que salía de la vivienda, signada con el número 19-44, decidieron entrar y encontrar la penosa escena.
Las primeras versiones daban cuenta de una presunta asfixia mecánica, pues según los informantes el hombre se cayó de su cama y se enredó con una franela.
Sin embargo, su hermano Eduardo José Cano, comentó que Ezequiel murió de un infarto producto, según este, de un posible robo, pues no era la primera vez que se metían a la vivienda para saquearla.
«No se encontró la cartera de mi hermano, ni su cédula y todo el cuarto estaba hecho un desastre. Aquí no hay seguridad y la policía nunca pasa por este sector» dijo el hombre.
Destacó que su pariente era administrador pero no ejercía, no dejó familia y él lo ayudaba económicamente.
Mientras tanto, vecinos del fallecido comentaron que Ezequiel «estaba loquito de tanto estudiar», pero no se metía con nadie, ni tenía enemigos.
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