Una marea de gente esperaba encontrarse con la reina luciteña en su procesión
Fotos: Wilmer Cubillán
Fieles se encontraron con la patrona de la visión, cuyos milagros son innumerables
Maracaibo — Al son de gaitas en su honor, la patrona de la visión salió en procesión a encontrarse con la multitud de fieles que le sirven y le agradecen por su intervención divina y favores concedidos.
Una vez culminada la última eucaristía del día, a las 5:55 de la tarde la imagen en bulto que reposaba sobre su carruaje, rodeada de rosas rojas y tenues luces, fue sacada en hombros por los servidores. Al llegar a la puerta de la iglesia campanas presidieron las lágrimas, sonrisas y emoción que desbordó a centenares de personas durante un largo recorrido que culminó aproximadamente a las 9:00 de la noche.
Cabe destacar que la devoción por Santa Lucía en el sector que hoy lleva su nombre es de una solidez casi unánime, ya que durante su recorrido cada casa además de tener banderines rojos y blancos, esperaron ver pasar a la santa mártir con altares en sus puertas, gaitas y luces.
Vale resaltar que durante todo el día la iglesia estuvo abierta, y desde las 6:00 de la mañana se realizaron misas cada hora, hasta las 11:00 de la mañana cuando se realizó la misa pontifical, celebrada por el arzobispo Ubaldo Santana.
De igual modo a la homilía asistieron autoridades estatales y municipales como el secretario de Gobierno del estado Zulia, Billy Gasca, y la concejal de la Cámara Municipal de Maracaibo, Ada Rafalli.
Favores concedidos
Entre la multitud que asistió a la iglesia y a la procesión de la santa luciteña, fue notoria la cantidad de padres que asistieron con sus niños a pagar promesas: «Mi hijo tenía tres años cuando en un descuido que tuve trató de agarrar un cuchillo de la cocina y le terminó cayendo en el ojo derecho, salimos corriendo al hospital pero yo en medio de mi desesperación solo le pedía a Santa Lucía que no dejara que perdiera el ojo ni la vista, los médicos lo curaron, le taparon el ojo por más de una semana y me dijeron que había que esperar cómo evolucionaba pero que era posible que no quedara viendo igual, cuando le quitaron el parche mi hijo tenía su ojo sanito, después de muchos estudios me dijeron que estaba totalmente bien, incluso ve perfecto y yo sé que es gracias a Santa Lucía», relató Silene Álamo.
Vanessa Ortigoza fue operada con éxito en mayo de este año de estrabismo, en agradecimiento su madre la llevó vestida de Santa Lucía porque así lo prometió si la niña quedaba bien de la intervención
En la iglesia de Santa Lucía se celebraron más de cinco misas consecutivas
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