En el ranchito convivía Meléndez junto a sus siete nietos, mientras los progenitores de los pequeños trabajaban
Foto: Daniel Rojas
La señora Meléndez resaltó que hace algunos meses también perdió algunas posesiones a causa de las lluvias ya que todo el rancho se le inundó
Maracaibo — Lesbia Meléndez lleva dos noches durmiendo arrimada. La señora, que perdió todas sus posesiones luego de que un incendio consumiera el ranchito en el que vivía, ahora se queda en casa de un hijo mientras espera lo prometido hace cuatro años: una casa de la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV).
«Los bomberos nunca volvieron a realizar inspecciones. El día del incendio solo nos dijeron que fuéramos el lunes 6 de junio a pedir la constancia del incendio», aseguró Lesbia.
«Érika me dejó en dos tablas», comentó la abuela mientras lamentaba la situación que padece ella y sus hijos, quienes perdieron también en el accidente una bomba de agua y una aspiradora con la que trabajaban en un pulilavado.
La afectada comentó que ayer, en horas de la mañana, esperaba la visita de Alexis Uzcátegui, miembro de la nueva junta del consejo comunal de San Sebastián III, para evaluar su situación. Cabe destacar que luego de que la expresidenta del referido consejo comunal, Érika Reina, (quien prometió a Meléndez una casa nueva), desapareciera del sector sin rendir cuentas a los habitantes, se conformó una nueva junta comunal. La señora Meléndez resaltó que hace algunos meses también perdió algunas posesiones a causa de las lluvias ya que todo el rancho se le inundó.
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