Para organizar la creación de la nueva casa de estudios, Maduro comisionó al joven ministro de Educación, César Trompiz. Para el póximo año las delegaciones planean reunirse en Nicaragua
Caracas- El mandatario nacional, Nicolás Maduro, decretó este miércoles la creación de de la Universidad Internacional de la Comunicación, para la formación de comunicadores sociales, alternativos y progresistas; con el objetivo de «luchar por las voces de los pueblos de América y el mundo».
“Yo pongo la sede, la logística y lo que sea necesario, jurídico, financiero, para que arranque muy pronto en el primer trimestre de 2020 esta universidad e integremos escuelas, academias, universidades. ¡Una universidad para la liberación, la conciencia, la defensa de la verdad y la batalla mundial!”, dijo el Jefe de Estado.
Desde Miraflores, escenario donde se clausuró el “Congreso Internacional de la Comunicación, Ahora Hablan los Pueblos” que sesionó en Caracas desde el 2 al 4 de diciembre, Maduro pidió a los delegados presentes considerar el nuevo centro de estudios, investigación y formación, como la Universidad Latinoamericana de Medicina (ELAM), que forma para la salud pública a jóvenes del mundo entero en forma gratuita.
La propuesta de la Universidad Internacional de la Comunicación surgió de los resultados obtenidos en el Congreso en Caracas, que fue leído por Tanía Díaz. Comisionó al joven ministro de Educación, César Trompiz, a coordinar la propuesta.
Además, anunció que el plan contempla la creación de una red mundial de comunicadores, articulada a los partidos y movimientos sociales de la región, para respaldar las luchas de los pueblos, además de la conformación de una multiplataforma internacional para el intercambio de contenidos.
Participación del Congreso
Con el lema «Ahora hablan los pueblos», el I Congreso Internacional de Comunicación reunió desde este miércoles en el hotel Alba Caracas, a 500 delegados de más de 40 países, con el propósito de «desmontar la campaña mediática contra las autoridades y el pueblo de la nación sudamericana».
Durante el Congreso, los delgados advirtieron sobre las intenciones de la Casa Blanca «de imponer su hegemonía con bloqueos económicos y golpes de Estados».
A su vez, exigieron al Gobierno de Estados Unidos el cese inmediato de la injerencia en los asuntos internos de los países de la región.
«Nos han venido haciendo la guerra a través de los medios de comunicación, una guerra salvaje, cruel, sin límites, sin normas, sin escrúpulos», aseguró.
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