Jorge Rodrigue señalo que una banda criminal liderada por diputados de la AN, el plan Navidad Sangrienta para atacar unidades militares el domingo 15 de diciembre. La idea era hacer un escándalo y empañar las navidades de Venezuela.
Caracas – El ministro de información, Jorge Rodríguez aseveró este lunes que los diputados Fernando Orozco, Ismael León y Gilber Caro están vinculados con el asalto al Batallón de Infantería de Selva 513, ubicado en la Gran Sabana Estado Bolívar.
«Una banda criminal liderada por diputados de la AN, el plan Navidad Sangrienta para atacar unidades militares el domingo 15 de diciembre. La idea era hacer un escándalo y empañar las navidades de Venezuela. No es un indicio ni una especulación, lo decimos con pruebas”, expresó Rodríguez en VTV.
«Tenía como objeto utilizar desertores que se encontraban entrenados en campamentos paramilitares en Colombia. Ahora hemos descubierto que parte del entrenamiento y dotación de logística no solo ocurrió con la colaboración de Colombia sino de Brasil y Perú. Esto en los últimos hechos perpetrados en la madrugada de ayer. El objetivo era el asalto de unidades militares en los estados Táchira, Zulia, Barinas, Aragua, Distrito Capital, Sucre Y Bolívar, utilizando paramilitares y policías en días posteriores».
Indicó que Caro «es un narcotraficante y un asesino confeso» y añadió «Gilber Caro pagó condena por asesinato, fue protagonista de todas las acciones violentas de los años 2014 y 2017 que dejaron personas sin vidas».
Refirió a a Josep Borrell, representante de la UE para la Política Exterior, quien en días pasados, exigió la liberación del diputado Caro y dijo «no sé si usted sabe que este señor. Él pagó 15 años de cárcel por homicidio intencional, por asesinar a un joven. Luego, estuvo preso por narcotráfico».
Según Rodríguez en Bolívar se robaron 120 fusiles de alta potencia y 9 lanzacohetes RPG para derribar un avión colombiano «y luego decir que se habían utilizado lanzacohetes de la Fuerza Armada venezolana, ese era el falso positivo».
Aseveró que los gobiernos de Colombia, Perú y Brasil tienen responsabilidad en estos hechos. “Estos criminales fueron entrenados en campamentos paramilitares plenamente identificados en Colombia y recibieron la colaboración artera del gobierno de Jair Bolsonaro” y acotó que recibieron “logística” en Perú.
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