El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el miércoles en un mitin con sus partidarios en las afueras de la Casa Blanca que nunca admitiría que perdió las elecciones, mientras el Congreso se preparaba para certificar la victoria de Joe Biden
Donald Trump llegó con casi una hora de retraso para hablar frente a sus partidarios frente a la Casa Blanca. «Nunca nos daremos por vencidos, nunca cederemos», dijo el presidente saliente antes de hacer referencia nuevamente al gran fraude electoral.
«Las elecciones en el Tercer Mundo son más honestas», exclamó Trump antes de pedir a sus partidarios que marchen hacia al Congreso, donde se certifican los votos electorales este miércoles, para felicitar a los representantes republicanos que intentarán impugnar los resultados de las elecciones presidenciales de noviembre, una maniobra destinada al fracaso.
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Trump también atacó a los medios de comunicación calificándolos como «el mayor problema que enfrentamos”. El mandatario reiteró de que el vicepresidente, Mike Pence, quien además ocupa el puesto de presidente del Senado, tiene el poder de ignorar las urnas en una sesión especial del Congreso, y calificó a los miembros electos republicanos de «débiles» y «patéticos».
«Si Mike Pence hace lo correcto, ganamos las elecciones», dijo el presidente saliente y agregó que «si no lo hace, será un día triste para nuestro país» sugiriendo que dudaba de la actitud de su número dos.
Pence dijo que no se opondría a la certificación de la victoria presidencial de Biden, explicando las «restricciones» que le impone la Constitución, en una carta publicada justo antes de la apertura de la sesión especial del Congreso para registrar formalmente los resultados de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.
Cada vez son más los miembros electos del Partido Republicano que comienzan a culpar al presidente, que se encierra en su capricho de negar su derrota.
Los republicanos están a punto de perder su mayoría en el Senado después de la probable victoria de los demócratas en las elecciones senatoriales de Georgia. Elecciones que se celebraron este martes en las que Raphael Warnock, el pastor de la iglesia de Martin Luther King, ganó, según los informes de los medios de comunicación estadounidenses. Será el primer senador negro en este estado del sur y Jon Ossof, el otro candidato demócrata, ya ha reivindicado la victoria. Esta doble derrota, si es confirmada, le dará a Joe Biden una mayoría en el Senado. Los demócratas ya controlan la Cámara de Representantes.
Dentro del Partido Republicano, se empiezan a oír voces que critican la actitud de Trump durante la campaña. «Trump es 100% responsable de la derrota del partido en Georgia», dijo el responsable republicano de las operaciones de votación en el estado.
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