Biden condenó lo que consideró un «ataque terrorista» contra Al Kazemi y dijo sentirse «aliviado» de que haya salido ileso del ataque con un dron bomba dirigido a la noche del pasado sábado 6 (hora local), contra su residencia en el centro de Bagdad.
El presidente estadounidense, Joe Biden, condenó el intento de asesinato con drones explosivos contra el primer ministro de Irak, Mustafá al Kazimi, y dijo que su gobierno ayudaría a las fuerzas de seguridad iraquíes a identificar a los responsables.
«Condeno firmemente el ataque terrorista contra la residencia del primer ministro iraquí al Kazimi», dijo Biden.
«Me alivia saber que el primer ministro no resultó herido y elogio el liderazgo que ha mostrado al llamar a la calma, la moderación y el diálogo para proteger las instituciones del Estado y fortalecer la democracia que los iraquíes tanto se merecen».
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Kazimi escapó ileso luego que un dron cargado de explosivos atacara su residencia en Bagdad la noche del sábado 6 (hora local).
El ataque postelectoral
Pero el ataque marcó una escalada en la agitación postelectoral del país.
La oficina del primer ministro describió el ataque como un «intento fallido de asesinato», mientras que el presidente iraquí Barham Salih lo calificó como un intento de «golpe de Estado contra el sistema constitucional».
El atentado no ha sido hasta ahora reivindicado por ninguna organización.
Biden dijo que «los perpetradores de este ataque terrorista contra el estado iraquí deben rendir cuentas» y condenó «en los términos más enérgicos a quienes utilizan la violencia para socavar el proceso democrático de Irak».
El líder estadounidense anunció que dio instrucciones a su equipo de seguridad nacional para «ofrecer toda la asistencia apropiada a las fuerzas de seguridad de Irak mientras investigan este ataque e identifican a los responsables».
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