Foto: Agencias
Roma — El papa Francisco aseveró ayer que la Organización de Naciones Unidas (ONU) debe ayudar a aquellas personas excluidas de los beneficios del progreso y usualmente consideradas como seres de segunda mano.
Durante una audiencia en el Vaticano con Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, el pontífice exhortó al trabajo para ayudar a estos individuos, quienes constituyen una parte importante de la humanidad.
Francisco llamó a desafiar todas las formas de injusticia y enfrentar a quienes favorecen la exclusión, el descarte y la muerte, informó Radio Vaticano. Insistió además, en el inicio de acciones que incidan sobre las causas estructurales de la pobreza y el hambre, así como en la promoción a nivel mundial de la ética, la fraternidad y la solidaridad como vía para erradicar las desigualdades. También instó a ONU a aprobar programas con mejoras a la protección de la familia.
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