La australiana Kathleen Folbigg, fue condenada en 2003 a 30 años de prisión por el asesinato de sus tres hijos y el homicidio involuntario del cuarto
Kathleen Folbigg, expreso que «estoy extremadamente aliviada y agradecida por haber sido indultada y liberada de la prisión», estas han sido sus primeras palabras, tras haber estado encarcelada injustamente durante 20 años por la muerte de sus cuatro hijos.
En el comunicado audiovisual divulgado este martes, Folbigg ha dado las gracias a su familia y amigos, que estuvieron con ella durante estas dos décadas. La mujer ha calificado la liberación como una «victoria para la ciencia y, sobre todo, para la verdad».
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La australiana fue condenada en 2003 a 30 años de prisión por el asesinato de sus tres hijos y el homicidio involuntario del cuarto, pero Folbigg siempre mantuvo su inocencia y dijo que los niños habían muerto por causas naturales. Una investigación inicial en 2019 determinó que las pruebas reforzaban su culpabilidad.
Sin embargo, una segunda investigación dirigida por el expresidente del Tribunal Supremo Thomas Bathurst revisó sus condenas en 2022 después de que nuevas pruebas sugirieran que dos de los niños tenían una mutación genética que podría haber causado sus muertes.
La investigación coordinada por la científica española Carola García Vinuesa vinculó los decesos a fallos genéticos. Bathurst, en un memorando dirigido al fiscal general, afirmó que existía una posibilidad razonable de que tres de los niños murieran por causas naturales, dos debido a una mutación genética conocida como CALM2-G114R y uno a causa de un trastorno neurogénico subyacente.
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