Georg Ratzinger (derecha) reconoció que él mismo a veces «pellizcaba las orejas» a los alumnos como parte de la disciplina
Foto: BBC Mundo
Roma — Con los reportes de 231 casos de abusos físicos, el abogado alemán Ulrich Weber, mostró al público una serie de documentos, resultado de la investigación que comenzó en mayo del año pasado y que presentó el viernes sobre los supuestos malos tratos y abusos sexuales infringidos durante cuatro décadas en un coro de niños de Ratisbona, una ciudad del centro de Baviera, Alemania.
Dicho coro, el Regensburger Domsplatzen, lo condujo por 30 años el hermano de Benedicto XVI, —actualmente monseñor— Georg Ratzinger, de 92 años. Pero fue la actual dirección la que encargó a Weber que indagara sobre las acusaciones.
«Disciplina» en demasía
Weber descubrió que entre 1953 y 1992 al menos un tercio de los alumnos del coro y de la escuela adjunta sufrieron algún tipo de abuso físico, desde palizas a privación de alimentos.
Entrevistó a decenas de víctimas y responsables de la institución, y concluyó además que en al menos 40 de los 231 casos registrados hubo violencia sexual, «desde tocamientos a violaciones», explicó a BBC Mundo.
Según Weber, el principal agresor fue Johan Meier, el director de la escuela adjunta al coro entre 1953 y 1992, cuando se jubiló. Falleció aquel mismo año, poco después de retirarse.
El compositor alemán Franz Wittenbrink lo recuerda bien. «Meier solía llevar a dos o tres niños de 8 y 9 años a su habitación por la tarde. Y allí les daba vino y se masturbaba con ellos».
Pero también los castigaba. En una ocasión lo acusaron de golpear a un niño con un taburete hasta romperlo en su espalda, recordó. «Era un ingenioso sistema de castigos sádicos relacionados con el placer sexual», explicó en 2010, cuando se dio a conocer el escándalo.
El hermano mayor de Benedicto XVI, condujo el coro de 1964 a 1994, por lo que tuvo que haber sabido de los abusos, cree Weber. Sin embargo, cuando en 2010, en pleno escándalo, le fue preguntado si sabía de la violencia perpetrada en el coro, lo negó. Aunque pidió perdón a las víctimas. Sobre los supuestos abusos sexuales, aseguró nunca haber oído hablar de ellos.
Comente