Servicios secretos de Francia vigilan a cerca de 7.500 personas que podrían verse implicados en proyectos terroristas. En los últimos dieciocho meses el país ha sufrido siete atentados y se han evitado otros cinco
La cifra la dio este miércoles el responsable de la Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI), Nicolas Lerner, en una entrevista a la emisora de radio France Info, en la que subrayó que «el terrorismo islamista» sigue siendo la principal amenaza a la que se enfrenta Francia.
Para ilustrarlo, recordó que en los últimos dieciocho meses el país ha sido víctima de siete atentados y se han evitado otros cinco.
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El peligro de los no fichados y la necesidad de reclutar agentes en Francia
La Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI) de Francia busca reclutar nuevos agentes en su lucha contra el terrorismo.
Lerner contó que junto al perfil más «tradicional» del terrorista, en los últimos años ha aparecido uno nuevo, el de «individuos más aislados», sin vínculos directos con organizaciones.
A ese respecto, hizo notar que los autores de los últimos nueve atentados no estaban fichados por los servicios secretos.
Esta operación de comunicación del director general de los servicios secretos se produce un día después de que la DGSI haya presentado su página web con el objetivo de que el público conozca sus misiones pero también para hacer la institución atractiva para los que quieran trabajar en su interior.
El objetivo es contratar a 1.200 agentes más de aquí a 2024 para llegar a 5.500.
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