Foto: Agencias
Washington — Decenas de personas manifestaron su cólera la noche del miércoles tras un nuevo enfrentamiento mortal entre un policía blanco y un joven negro en Sant Louis, cuyo suburbio Ferguson fue escenario de violentas protestas raciales en agosto pasado.
El oficial, que en ese momento no estaba en servicio pero hacía una ronda de vigilancia para una empresa de seguridad privada, disparó y mató a un negro de 18 años que lo agredió.
Un vocero indicó que el joven había disparado primero tres veces al funcionario, que respondió con 17 tiros. El fallecido era uno de los tres sospechosos que llamaron la atención del funcionario que patrullaba en esa parte de la ciudad.
Al verlos, salió de su vehículo y los jóvenes huyeron, dijo el vocero, agregando que el policía se lanzó a perseguirlos.
«Uno de los hombres se acercó al oficial agresivamente. El oficial le dió varias veces la orden de que se detuviera», agregó.
Empezaron a pelear y el sospechoso «apuntó con su arma al oficial y le disparó al menos tres veces», dijo, y continuó: «El policía respondió porque le estaban disparando».
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