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Washington no publicó el número ni los nombres de los afectados, pero se indicó que la medida abarca a funcionarios judiciales, policiales, militares, ministros y asesores
Washington — Estados Unidos negó ayer visas de viaje a un «número de funcionarios» venezolanos a los que acusa de violaciones de derechos humanos durante recientes protestas antigubernamentales, lo que agrava las fisuras en los ya frágiles lazos bilaterales.
«El secretario de Estado decidió imponer restricciones de viaje a Estados Unidos a un número de funcionarios venezolanos que son responsables o cómplices de violaciones de derechos humanos», dijo la portavoz Marie Harf. «Nuestro mensaje es claro: aquellos que cometen esos abusos no serán bienvenidos en Estados Unidos», añadió.
Washington no publicó el número ni los nombres de los afectados, pero la portavoz indicó que la medida abarca a funcionarios judiciales, policiales y militares, así como a ministros y asesores del presidente Nicolás Maduro, electo en 2013 tras la muerte de Hugo Chávez (1999-2013). Otras fuentes indicaron, sin verificación oficial, que serían 24 nombres en la lista.
Estas restricciones les impedirán viajar a EE UU, país que los chavistas tildan de «imperio», aunque en ocasiones es destino vacacional de dirigentes oficialistas.
Las razones
Washington dirigió las sanciones a funcionarios a los que acusa de «detenciones arbitrarias» y «uso excesivo de la fuerza» para controlar las protestas antigubernamentales que sacudieron varias ciudades venezolanas entre febrero y mayo, con un saldo de 43 muertos.
EE UU también denunció esfuerzos repetidos en Venezuela por intimidar judicialmente a la disidencia, limitar la libertad de prensa y silenciar a los opositores.
Las sanciones ocurren tras meses de tensiones entre los países por acusaciones mutuas, y tres días después de un fallido intento de EE UU para asegurar la extradición del diplomático Hugo Carvajal luego de que fuera detenido en Aruba y finalmente liberado por orden del reino de Holanda.
«No ven, ni oyen»
El canciller venezolano Elías Jaua dijo que la medida es una «represalia» por el papel de Venezuela en América Latina. «Son acciones desesperadas que ellos toman contra nosotros (…) pero bienvenida sea su furia». A su juicio, les dolió la visita de Xi Jimping y la cumbre del Mercosur. «EE UU no entiende, ni puede oír, ni ver lo que pasa, solo tienen como respuesta el garrote (…). Les ha dolido mucho esto y en vez de quedarse calladitos, lo hacen evidente».
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