Avanza el censo de damnificados para empezar con la entrega de las ayudas en la ciudad de Barranquilla, aunque la búsqueda del desaparecido es prioridad
«Es el aguacero que ha creado más emergencias por la cantidad de agua que cayó, estamos avanzando en el censo», indica Remberto Quintero, coordinador de la oficina de Gestión del Riesgo del Distrito.
Varias familias padecieron por las inundaciones. Solo en el barrio Villa San Carlos, en el suroccidente de Barranquilla, el desbordamiento de un arroyo inundó al menos 15 casas. Rut Mora, una de las damnificadas dice que «el arroyo no tiene la capacidad suficiente para conducir mucha agua y siempre nos inundamos».
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Entre tanto, autoridades indicaron que fueron 40 los vehículos que quedaron en medio de los voraces arroyos de Barranquilla y Soledad tras el torrencial aguacero que dejó niveles de precipitaciones por encima de los 80 milímetros.
En el barrio Pumarejo, de Soledad, los damnificados por la lluvia protagonizaron disturbios en momentos en que organismos de socorro realizaban el censo para contabilizar los afectados.
José Sánchez, vocero de la Defensa Civil, contó que debió intervenir el Esmad y esto ocasionó afectaciones a mujeres y niños por los gases lacrimógenos.
«Fue necesario que interviniera el Esmad porque la comunidad protagonizó disturbios y arrojaron objetos a quienes hacían el censo. Los gases lacrimógenos afectaron a niños y adultos mayores», contó José Sánchez, vocero de la Defensa Civil.
La Secretaría de Salud y su personal de apoyo atendieron las emergencias ocurridas en el Camino Simón Bolívar (centro de salud), desde donde se trasladaron tres pacientes al Camino Adelita de Char mientras se normaliza la situación.
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