Todavía no eran las 18 horas del lunes 9, hora prevista para el acto, y la Avenida Paulista ya estaba ocupada por miles de manifestantes en defensa de la democracia. Convocada por los frentes Povo Sem Medo, Brasil Popular y Coalición Negra por los Derechos, la protesta de São Paulo se sumó a decenas de otras organizadas por Brasil en reacción al ataque golpista de los bolsonaristas a las tres Potencias en Brasilia (Palacio de Plan Alto), el pasado domingo 8 de enero.
«Castigo para Bolsonaro y su familia» es lo que exigían los manifestantes por la democracia en la capital de Río de Janeiro. La lluvia no perturba la concentración en Cinelândia, ubicada en la región central.
La consigna más escuchada fue «no a la amnistía». La demanda se centró particularmente en responsabilizar al expresidente Bolsonaro por los crímenes cometidos durante su mandato. Ese mandato cuyos últimos días los pasó en Estados Unidos, donde permanece al no tener ya un foro privilegiado.
El reclamo, ya expresado con contundencia por la multitud que asistió a la toma de posesión del presidente Lula, ahora toma nuevos contornos, con la exigencia de que rindan cuentas los golpistas y, principalmente, sus financiadores, promotores y autoridades estatales confabuladoras.
«Ya derrocamos a Bolsonaro en las urnas, vamos a derrocar al bolsonarismo en las calles», dijo un miembro de Uneafro al micrófono.
Alrededor de las 8 de la noche, decenas de miles de personas comenzaron a caminar hacia el centro de la ciudad. La hinchada organizada de los cuatro grandes equipos de São Paulo estuvo presente en el evento, con destaque para una gran presencia de Gaviões da Fiel.
V
olver a ocupar las calles de Brasil
«Los demócratas tenemos que salir a la calle. ¿No tuvimos casi 500.000 personas en Brasilia en esa hermosa fiesta (la toma de posesión de Lula)? Ahora salimos de la calle, que estos locos tomen las calles diciendo que ellos son el pueblo, en las calles”, dijo. Chico Malfitani, uno de los fundadores de Gaviões da Fiel. «¿Cómo abrimos la vía con una facilidad tremenda? Solo fue cuestión de presentarse y se dieron a la fuga. Salieron de los carriles, dejaron todo. Lo mismo en la costanera, dejaron hasta una moto con la llave», dijo. dijo, en alusión a la acción de Gaviões da Fiel para despejar caminos.
Nani Sacramento, de la dirección nacional de la Central de Movimentos Populares (CMP), afirmó que «la manifestación está dando un contrapunto a lo que pasó ayer en Brasilia, contra nuestra democracia». «Fue un acto ilícito, criminal de hecho, un acto nazi. La fuerza popular no es eso. Venimos a demostrarles, primero, que ese lugar no es solo de ellos, es nuestro. Somos la mayoría y esa mayoría habló en la encuestas en El 30 de octubre, Luiz Inácio Lula da Silva iba a sacar a Brasil de la oscuridad, y va a sacar a Brasil del agujero en el que jugaba Bolsonaro», dijo. «La democracia no es lo que era ayer. La democracia es lo que verás hoy», agregó.
La diputada federal Célia Xakriabá (segunda de izquierda a derecha)presentó un pedido de juicio político contra Ibaneis Rocha, gobernador del DF, por su falta de acción ante actos terroristas. Participó en la manifestación frente al Palacio Buriti.
Más temprano, los manifestantes gritaron «fuera Ibanes», gobernador del Distrito Federal. Previamente, Ibanes Rocha fue destituido de su cargo por 90 días por el Supremo Ministro Alexandre de Moraes.
Ataques a refinerías
En la ciudad de Araucária (PR), bolsonaristas intentaron bloquear el acceso a la Refinería Getúlio Vargas (Repar). Arrojaron un camión lleno de tierra en la entrada del sitio. El Batallón de Choque de la Policía Militar dispersó al grupo y dos personas fueron detenidas.
En São José dos Campos, unas 30 personas intentaron impedir la entrada de camiones a la Refinería Henrique Lage (Revap). Fueron controlados por la Policía Militar.
La policía también monitorea el movimiento de estafadores en la Refinería Isaac Sabbá, en Manaus (AM), que pertenece al sector privado.
En otras regiones de Brasil no se registraron problemas, pero las fuerzas de seguridad continúan actuando para evitar cualquier intento de ataque. La FUP dirige a los trabajadores de las unidades a denunciar violaciones y actos antidemocráticos en las inmediaciones de las refinerías.
En la noche del domingo, la Federación alertó a la Dirección Ejecutiva de Inteligencia y Seguridad Empresarial (ISC) de Petrobras y exigió medidas de seguridad, visando no sólo la normalidad del abastecimiento, sino la seguridad de quienes actúan en esos lugares.
El Ministerio de Minas y Energía emitió ese mismo día una nota garantizando la normalidad del suministro y el buen funcionamiento de las refinerías, terminales y bases de distribución, «en conjunto con las entidades relacionadas».
Los actos terroristas contra unidades de Petrobras, que estaban siendo organizados por bolsonaristas a través de las redes sociales, no se materializaron y la situación es normal en todas las refinerías de Brasil.
La información fue transmitida por la Federación Única de los Trabajadores del Petróleo (FUP), por el Ministerio de Minas y Energía y por el senador Jean Paul Prates (PT-RN), postulado para ser el nuevo presidente de la estatal.
Según todos los involucrados en la contención de los actos extremistas, las refinerías están a salvo y ningún ataque ha tenido éxito.
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