El Ejército de Israel también informó el miércoles que realizó operaciones terrestres en el área del Hospital Shifa en el norte de Gaza, al mismo tiempo que llevó a cabo ataques aéreos y combates terrestres en el área de Khan Younis en la parte sur de la Franja de Gaza
Militantes de Hezbolá en el Líbano lanzaron cohetes el miércoles contra el norte de Israel en represalia por los ataques aéreos israelíes que mataron a siete personas en el sur del Líbano.
El Ejército israelí dijo que sus ataques tuvieron como objetivo un edificio militar, matando a un miembro del grupo militante al-Jamaa al-Islamiya que había promovido complots terroristas dirigidos contra Israel.
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La agencia de noticias Agence France-Presse (AFP) citó a un funcionario de al-Jamaa al-Islamiya diciendo que siete personas murieron en la aldea de Hebbariyeh. Fuentes de seguridad libanesas dieron a Reuters el mismo número de víctimas.
La violencia transfronteriza es el último intercambio que se producirá mientras Israel lleva a cabo su campaña destinada a eliminar al grupo terrorista Hamás, un aliado de Hezbolá, en la Franja de Gaza.
El Ejército de Israel también informó el miércoles que realizó operaciones terrestres en el área del Hospital Shifa en el norte de Gaza, al mismo tiempo que llevó a cabo ataques aéreos y combates terrestres en el área de Khan Younis en la parte sur de la Franja de Gaza.
Los esfuerzos para detener temporalmente los combates, con propuestas que incluían la liberación de rehenes retenidos en Gaza y un aumento de la ayuda humanitaria para los civiles palestinos, no parecieron más cercanos a la realidad, incluso después de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que exigía un alto el fuego inmediato.
Las conversaciones indirectas con negociadores de Estados Unidos, Egipto y Qatar se prolongaron durante semanas, y aunque los funcionarios señalaron algunos avances durante el proceso, las partes israelí y Hamas esta semana no han mostrado ningún movimiento hacia un acuerdo.
Un alto funcionario israelí dijo a Reuters el martes que Israel había retirado a sus negociadores de Qatar después de llegar a «un callejón sin salida» en las conversaciones para liberar a los más de 100 rehenes que aún están retenidos por Hamás. Israel cree que más de 30 israelíes capturados el 7 de octubre han muerto. Esto se produjo después de que el israelí Benjamín Netanyahu calificara las propuestas de Hamás de «demandas delirantes».
Funcionarios de Hamás dijeron el lunes que dijeron a los negociadores que Hamás no alteraría su propuesta que incluye una retirada total de Israel de Gaza y un intercambio de rehenes retenidos en Gaza por prisioneros retenidos por Israel.
En Tel Aviv, unos 300 familiares de rehenes y sus partidarios se reunieron el martes frente al cuartel general de la defensa israelí para exigir que se llegara a un acuerdo sobre la liberación de los rehenes. Algunos en la protesta se encerraron dentro de jaulas y sostenían carteles con fotografías de sus seres queridos.
La guerra comenzó con el ataque terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre que mató a 1.200 personas según los recuentos israelíes y condujo a la captura de unos 250 rehenes. Más de 100 fueron liberados en noviembre durante un alto el fuego temporal.
El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza gobernada por Hamas dice que más de 32.400 personas han muerto durante la contraofensiva de Israel. El total incluye combatientes de Hamas y civiles, y el ministerio dice que dos tercios de los muertos son mujeres y niños.
También el martes, el principal enviado de la ONU para Medio Oriente, Tor Wennesland, informó al consejo en su reunión ordinaria sobre su resolución de 2016 sobre la ilegalidad de los asentamientos israelíes en el territorio palestino ocupado, incluida Jerusalén Oriental.
Del 8 de diciembre al 18 de marzo, dijo Wennesland, Israel ha avanzado o aprobado más de 5.000 unidades de vivienda en la ocupada Cisjordania y Jerusalén Este. Además, se demolieron 300 edificios de propiedad palestina.
«Sigo profundamente preocupado por la implacable expansión de los asentamientos israelíes en la ocupada Cisjordania y Jerusalén Este», dijo al consejo en una sesión informativa desde Jerusalén. «La huella de los asentamientos en constante expansión, incluidos los puestos de avanzada, consolida aún más la ocupación, al tiempo que impide gravemente el ejercicio por parte del pueblo palestino de su derecho a la autodeterminación».
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