El vicepresidente de Sony de Venezuela, Omar Bernal, expresó que la empresa no se está yendo del país. «Estamos adaptando el tipo de operaciones que teníamos al que se necesita para sobrevivir. Venezuela siempre ha sido un buen mercado para nosotros», apuntó.
Sony tiene en el país una oficina de representación y las importaciones las realizarán terceros, al igual que la distribución de sus productos, partiendo de la premisa de que las empresas locales tienen la ventaja de adaptarse más rápido al mercado.
En Venezuela, la empresa tiene 150 distribuidores autorizados, que también se surten de otras marcas y ofrece servicio técnico a través de 30 talleres, pero no escapa de las dificultades para acceder a divisas para importar partes y piezas.
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