Foto: Agencias
Caracas — Pablo Baraybar, presidente de Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (Cavidea), manifestó ayer que las empresas afiliadas a su cámara se comprometen a incrementar en 24 meses la producción en un 26%, si el Gobierno nacional da las condiciones adecuadas.
Indicó que el empresariado privado está dispuesto a adquirir las fábricas de alimentos del Gobierno que están paralizadas o con baja productividad.
Asimismo, señaló que la deuda con los proveedores del sector de alimentos asciende ya a 2.700 millones de dólares. En ese sentido pidió que se reconozca el pago de esa deuda, se reajuste el mecanismo de precios y se revisen las calificaciones de despido, tema que en reiteradas oportunidades han solicitado los empresarios del país.
Sostuvo que cuando pusieron en sobre aviso al Gobierno en abril de 2013, sobre el riesgo de que las empresas se paralizaran por falta de materia prima, la deuda era de 920 millones de dólares.
En ese sentido, Baraybar dijo que debido a la falta de insumos, 19% de las empresas pertenecientes a Cavidea tienen paralizada la producción y que aunado a esto, por conflictos laborales generan pérdidas mensuales de hasta 10% de su producción.
Agregó que ha ido a todas las reuniones convocadas por el Ejecutivo para expresar la preocupación de las empresas de alimentos por el aumento de la escasez, el rezago en los precios controlados porque en algunos casos hay rubros con más de 30 meses sin revisión; y el aumento del ausentismo laboral.
El presidente de Cavidea también resaltó que a causa de las paradas no programadas en las líneas de producción, se pierde 21% de la materia prima.
Además puntualizó que su cámara propuso al Ejecutivo que si se flexibilizan los controles y asignan oportunamente las divisas se puede incrementar la producción «en lo inmediato».
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