Caracas — La Asociación Venezolana de Casas de Cambio informó a todos sus clientes, trabajadores y entes reguladores que hasta la fecha llevan 60 días casi paralizados, debido a la entrada en vigencia de la providencia 123 que fue publicada el 24 de enero de 2014, la cual establece los requisitos y trámites para la autorización de adquisición de divisas destinadas a operaciones de remesas a familiares residenciados en el extranjero, así como la providencia 126 que fue publicada el 7 de febrero en la que se establece la suspensión de todas las operaciones de remesas familiares a Colombia.
Asimismo, informaron que debido a la suspensión de remesas los deja en una inoperatividad absoluta, «amenazando con nuestra desaparición, y poniendo así en riesgo a más de 2 mil empleados».
También indicaron que la mayoría de las remesas van destinadas a Colombia, porque se trata de un país vecino y las migraciones entre ambos países son históricas.
El Estado propone ahora que las remesas sean pagadas en pesos colombianos y no en dólares, por ello se hace énfasis en que todas las remesas que se envían a Colombia se cancelan a sus destinarios en pesos.
Por último, le hace un llamado al Gobierno para que reactive el servicio de las remesas a Colombia, ya que «lo hacemos por nuestros usuarios, los cuales son más de 175 mil personas, y por los más de 2 mil trabajadores que están desplegados en las 152 oficinas en todo el país.
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