Foto: AFP
Serena Williams se retiró ayer de su partido de la Copa Hopman, torneo preparatorio para el Open de Australia, a causa de un dolor en la rodilla, pero su participación en el primer torneo Grand Slam del año no está puesta en duda.
La estadounidense prefirió renunciar antes del final de su partido ante la australiana Jarmila Wolfe, en Perth, cuando perdía por 7-5 y 2-1. La menor de las hermanas Williams tampoco había disputado su partido del lunes a causa de una inflamación en la rodilla izquierda. Williams no se mostró preocupada no obstante por su presencia en el torneo de Melbourne, en el que defenderá el título a partir del 18 de enero.
«Es simplemente una inflamación, hace falta todavía un poco de tiempo, de descanso y de sueño. Soy positiva y sé que todo irá bien», señaló la número 1 del mundo, de 34 años.
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