Puñalada aguilucha

Un nuevo año, pero la misma historia. La cola para adquirir entradas al primer juego de las Águilas del Zulia en el roun robin eran kilométricas desde tempranas horas de la mañana, por lo que los amigos especuladores hicieron «desguace» a los fanáticos, al revender las entradas hasta al doble de su precio original. La gerencia de los «rapaces» no mueven un dedo al respecto, y mientras los entusiastas seguidores vaciaban sus bolsillos, otros se llenaban a costa del fanatismo.

En boca de los fanáticos. «¡Oh y está mansita! Aquí se nos va el día y no entramos al juego», expresaban quienes llegaban ansiosos por comprar el boleto que les permitiera apoyar al conjunto de béisbol profesional Águilas del Zulia de la Liga Venezolana en el primer juego del «todos contra todos» de la pelota criolla.

Como ya es de costumbre, las Águilas han logrado desde hace seis campañas atrás, la clasificación al round robin de la pelota criolla y, «como siempre, el fanático es el que sufre», expresó un comprador molesto bajo el sol característico de la capital del estado occidental.

Aguinaldos post 2013

Los boletos tienen precio establecido en taquilla por la organización del equipo: VIP y sillas abajo, 214 bolívares; palco terreno, 200 bs.; sillas arriba 170 bs.; laterales 70, y para estudiantes 35; gradas 40 y estudiantes 20.

Pero estos precios en manos de los amigos especuladores, suelen llegar a valer hasta un 100% más, en el caso de palco terreno. QUÉ PASA indagó y los precios llegaban hasta los 400 bolívares por boleto.

La organización Águilas del Zulia no se manifiesta al respecto, ni aplica un sistema que sea funcional y justo para con todos los seguidores del béisbol. Águilas en su afán por vender entradas, golpea indirectamente por la espalda a quien le da vida a las gradas en el coso marabino; los que gritan, silban, tocan instrumentos y hasta cantan consignas para apoyar al conjunto «rapaz».

¿Seguridad para el ciudadano o para las ventas?

Quien pudo acercarse al estadio logró ver un gran número de efectivos policiales y de la Guardia del Pueblo resguardando a… ¿Los fanáticos? o ¿Los intereses del equipo aguilucho? No se podría saber a ciencia cierta, lo que sí no se lograron ocultar es que hay revendedores que son «compinches» de estos uniformados y logran sacar hasta 10 boletos por persona (con una sola cédula), cuando solo debe permitirse tres tiques por cédula de identidad.

Por su parte, en nuestra visita y caminando entre los fanáticos nos llevamos una buena sorpresa, el teniente a cargo de la Guardia se acercó a uno de los especuladores (que sin pudor contaba una gran cantidad de dinero en una banqueta), solicitó abrir el bolso que portaba, develando que éste tenía en su poder un puñado de cédulas de identidad. El teniente detuvo al sujeto y regresó a los dueños respectivos el instrumento personal.

Como dice el dicho, «la comodidad se paga». El detenido cobraba un poco más que el resto, puesto que recibía los documentos de identificación, iba directamente a la taquilla, pasaba «hecho el wili» y en un abrir y cerrar de ojos, el fanático «apresurado y necesitado» tendría su pase en mano, sin hacer cola, ni aguantar sol.

Inhumanos

A pesar del sol, algunos sonreían y se notaban entusiasmados, porque —de conseguir una entrada— al caer la tarde escucharían desde sus asientos la voz de ¡Play ball!

Pero no para todos fue color de rosa, unos se sentaban en bloques, otros en potes de pinturas; varios llevaron sus sillas playeras buscando alguna «sombrita» de algún árbol; algunos sin importarles nada, solo obtener una entrada y hasta tres; se posaron en las taquillas desde la 1:00 a.m. de la madrugada de este viernes hasta que abrieran la taquilla. La misma es abierta al público a partir de las 8:00 a.m.

Orinado y sin entradas

Pasadas las cinco horas de espera, más de uno sintió la sensación y necesidad fisiológica de ir al baño. El estadio Luis Aparicio «El Grande» cuenta con instalaciones sanitarias para ambos sexos, pero para el señor Urdaneta el paso estuvo restringido.

«¿Tú crees que es posible que nieguen el acceso para ir al baño?, si ni siquiera habilitan baños portátiles, al menos déjennos usar los del estadio, algunos estamos aquí desde las 4:00 de la mañana», indicó Urdaneta, quién con «dolores y problemas abdominales», y sin poder contener la acción humana de su cuerpo, se orinó en la bermuda.

«Es una falta de respeto a los fanáticos, esto no es posible… haré una denuncia a la seguridad privada contratada por las Águilas del Zulia, se burlaron de mí y me dijeron que viera cómo hacer, pero que no podía pasar, siendo nosotros quienes les damos vida al evento deportivo», indicó molesto Urdaneta, quien a su vez es presidente de la asociación de vecinos del sector Manzana de Oro.

Queda demostrado, de nuevo, que la organización en la taquilla por parte de las Águilas del Zulia no es la más indicada, pero para la franquicia el objetivo es vender, así queden asientos vacíos no importa, las entradas que les quedan «abolladas» a los revendedores es igual dinero y entrada vendida en taquilla, lo que genera ganancias para el equipo.

Águilas se clasificó por sexta vez en forma consecutiva a la postemporada de la liga, durante esta fase el equipo zuliano jugará en el Luis Aparicio en ocho ocasiones; este viernes fue la primera aparición de las Águilas en el «todos contra todos» y el equipo es el gran beneficiado. ¿Seguirá la misma novela en los próximos siete encuentros? Amanecerá y veremos.