No queremos venganza

Foto: AFP

Funcionarios de prisiones sudafricanos dijeron que Oscar Pistorius pasó su primera noche en una celda individual en la enfermería de una cárcel de la capital, Pretoria.

El responsable de Prisiones, Zebilon Monama, dijo a un medio local que Pistorius parecía confundido y cansado cuando entró en las instalaciones de Kgosi Mampuru y que el martes por la tarde recibió las visitas del psicólogo y el capellán de la cárcel. Añadió que Pistorius comparte la zona de enfermería con otros ocho presos con discapacidad.

El atleta pasó un examen médico antes de ser recluido en su celda. El ala de enfermería tiene rutinas de observación de 24 horas con dos enfermeras de guardia.

El Departamento de Servicios Correccionales de Sudáfrica dijo que en cárceles del país reciben cada año una media de 128 presos con discapacidad, menos del 1% de la población total de reclusos de 157 mil personas.

La madre de la novia de Oscar Pistorius declaró el miércoles que no quería «venganza», un día después de que el atleta paralímpico sudafricano fuera condenado a cinco años de prisión por matar a tiros a Reeva Steenkamp. El acusado fue «condenado a una pena máxima de cinco años de cárcel», dictaminó el martes la jueza Thokozile Masipa, quien en septiembre declaró a Pistorius culpable de homicidio involuntario.

June Steenkamp declaró al canal británico ITV que estaba «satisfecha» con la sentencia contra Pistorius, a pesar de que existía la posibilidad de que después de purgar diez meses de cárcel fuese colocado bajo prisión domiciliaria. «Nosotros no queremos venganza, queremos un castigo justo según las circunstancias teniendo en cuenta su discapacidad», agregó June Steenkamp, apretando la mano de su esposo Barry. «Nosotros no hubiéramos querido que fuese a la cárcel y que fuera maltratado, y yo creo que él comprenderá que no puede hacer eso, que no puede matar a alguien», insistió.