Messi clasificó a la albiceleste

Foto: Agencias

A veces un jugador basta y sobra para darle la victoria a un equipo. Y si ese jugador es Lionel Messi, todo puede ser posible. Hasta el minuto 90, el portero Sergio Romero era la gran figura de Argentina para preservar el cero en su arco ante la selección de Irán, pero Messi sacó de la chistera un disparo desde la media distancia para romper las mallas y hacer estallar el Estadio Mineirão Belo Horizonte, que vistió en su gran mayoría de albiceleste.

«El enano frotó la lámpara», expresó Romero en referencia a Messi al término del cotejo. El 1-0 no solo le dio los tres puntos al equipo sudamericano, sino que también lo clasificó a los octavos de final y ratificó al 10 como líder de una selección que busca el tricampeonato.

A pesar de contar con los «Cuatro Fantásticos» en ataque —Gonzalo Higuaín, Lionel Messi, Sergio Agüero y Ángel Di María—, Argentina careció de creatividad y movilidad en su ofensiva, por lo que escasearon las ocasiones de gol ante un equipo ultradefensivo. Solo las jugadas a balón parado en el primer tiempo crearon peligro en el marco iraní.

Acciones

Con el balón siempre en su poder, Argentina tuvo la primera oportunidad al minuto 13 con un pase profundo de Gago para Higuaín que el meta Alireza Haghighi logró repeler tras una salida rápida.

Posteriormente, una buena combinación por la izquierda del ataque argentino terminó en una cesión en el área de Higuín para Agüero, pero de nuevo Haghighi salvó su arco y envió al tiro de esquina.

Los minutos avanzaban y el conjunto asiático se retrasaba más dentro de su área, con sus 11 jugadores en terreno defensivo y cerrándole los espacios a la delantera rival. Cabezazos desviados de los defensores Rojo y Garay terminaron una primera parte muy gris para los sudamericanos.

Irán se creció

En el complemento, los persas se atrevieron un poquito en ataque e hicieron temblar a la selección Argentina.

En un contraataque liderado por Masoud Shojaei, el delantero Reza estuvo cerca de marca el primer gol, pero Sergio Romero estuvo inmenso para detener el cabezazo.

«Chiquito» Romero empezaba a ser trascendental y salvó a Argentina en dos oportunidades más. Otro cabezazo, esta vez de Ashkan Dejagah volvió a lucir al número uno albiceleste. Argentina no encontraba ideas, por lo que Sabella ingresó a Lavezzi y Palacio para buscar más ataque por las bandas, pero su empuje no cambió mucho las cosas.

Al minuto 86, Reza recibió un pase en diagonal de Alireza, pero Romero, inspirado en tierras cariocas, se quedó con el balón en dos tiempos tras el remate del delantero.

En la agonía del partido, cuando parecía que Argentina sacaba un triste empate en Belo Horizonte, Messi decidió hacer todo por su cuenta y sacó una genialidad de sus botines para darle la victoria a los suyos ante la algarabía de la grada local.