Foto: Agencias
Un partido para el olvido fue el jugado ayer por el serbio Novak Djokovic ante el francés Gilles Simon en los octavos de final del Abierto de Australia. El número uno del mundo tuvo una actuación muy por debajo de su nivel; al cometer hasta 100 errores no forzados durante el partido.
«Nole» tuvo que reponerse de sus errores para conseguir su pase a la siguiente instancia, tras vencer al galo con marcador de 6-3, 6-7 (1-7), 6-4, 4-6 y 6-3, luego de cuatro horas y 32 minutos de suspenso. Si bien Djokovic hizo bastante para perder —el centenar de fallos superó por amplio margen sus 62 tiros ganadores—, también es cierto que Simon no hizo lo suficiente para dar el gran golpe del torneo. «Muchas cosas podrían haber sido distintas. Es cierto que él cometió muchos errores, pero no fueron suficientes», aceptó Simon.
Poco acertado
«No tires más drops», le gritaron a Djokovic desde la platea por los errores que cometía. El número uno del mundo reconoció que no creía que podía haber equivocado tanto, que no pensó que llegaría a cometer los 100 errores no forzados, algo poco habitual en el jugador de 28 años, quien había acumulado apenas un total de 78 fallos en sus tres anteriores compromisos.
Duro rival
En los cuartos de final lo espera Kei Nishikori, que superó al francés Jo-Wilfried Tsonga por 6-4, 6-2 y 6-4, y a modo de antecedente, superó a Djokovic en las semifinales del US Open 2014. Será otro examen para el número 1 del mundo, que trastabilló pero aún sigue en busca de su sexto título en Melbourne.
Federer dio una clase
Por su parte, Roger Federer mostró toda su catgoría para batir en tres sets corridos al belga David Goffin con marcador de 6-2, 6-1 y 6-4 en una hora y 28 minutos.
Treinta y nueve golpes ganadores condujeron al cuatro veces ganador del torneo hacia la antepenúltima ronda, donde se medirá con el checo Tomas Berdych, verdugo del español Roberto Bautista. Tras alcanzar por duodécima vez en su carrera los cuartos de final del primer Grand Slam de la temporada, el campeón del Abierto de Australia en 2004, 2006, 2007 y 2010 confía en derrotar nuevamente a Berdych, sexto favorito.
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