Los dos trabajadores del hotel que tampoco enfrentarán cargos son Gilda Martin, su jefa de seguridad, y Esteban Grassi, el recepcionista jefe que hizo una llamada de emergencia justo antes de que Payne muriera
Se retiraron los cargos de homicidio contra un amigo de Liam Payne y dos miembros del personal del hotel donde murió el cantante. Este miércoles 19 de febrero, los jueces del tribunal de apelaciones revocaron la decisión anterior de acusar a Rogelio «Roger» Nores y dos trabajadores del hotel de Buenos Aires fueron acusados en diciembre, dos meses después de la muerte de la estrella de One Direction.
Sin embargo, otros dos hombres acusados de vender cocaína a Payne antes de su muerte permanecen en prisión y se les ha dicho que aún enfrentan un proceso judicial y un probable juicio.
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El artista murió en octubre pasado al caer de un balcón del Hotel CasaSur Palermo de la capital argentina.
Tras el anuncio de que se habían retirado los cargos contra Nores, el empresario comentó a la revista Rolling Stone: «Me alegro de que esto haya terminado finalmente. Estoy feliz de poder viajar al Reino Unido y despedirme de mi amigo».
Su abogado, Rafael Cuneo Libarona, manifestó estar «feliz de haber revertido la decisión». Agregó: «Siempre hemos sostenido que Rogelio Nores no fue responsable de la muerte de Liam Payne».
«Él solo era su amigo y no tenía ningún deber ni obligación legal de garantizar su seguridad».
El señor Cuneo Libarona, hermano del ministro de Justicia de Argentina, había refutado las afirmaciones de la fiscalía de que el señor Nores había fallado en su deber de cuidado al cantante.
El fallo
Los tres jueces del tribunal de apelaciones publicaron su fallo, obtenido por primera vez por Rolling Stone, ocho días después de una audiencia en la Cámara Nacional en lo Criminal y Correccional de Argentina.
Los dos trabajadores del hotel que tampoco enfrentarán cargos son Gilda Martin, su jefa de seguridad, y Esteban Grassi, el recepcionista jefe que hizo una llamada de emergencia justo antes de que Payne muriera.
Los tres hombres habrían enfrentado posibles sentencias de prisión de entre uno y cinco años si fueran declarados culpables, aunque se les indicó que podrían ser elegibles para sentencias suspendidas.
Los fiscales tienen la opción de apelar la decisión de revocar los cargos, pero aún no han indicado si lo harán.
Los dos hombres que aún enfrentan cargos son el camarero Braian Nahuel Paiz y el suspendido trabajador del hotel, Ezequiel David Pereyra, acusados de suministrar drogas a Payne. Podrían enfrentar penas de prisión de entre cuatro y 15 años si son hallados culpables.
Se dijo que el supuesto papel de Nores como gerente y representante de Payne, una posición que él había negado ocupar, había sido un elemento importante en la decisión de procesar al empresario.
En un fallo de acusación en diciembre, la jueza Laura Bruniard acusó a Nores de «fallar en su deber de cuidado, asistencia y ayuda» hacia el cantante.
Nores precisó anteriormente en una declaración: «Nunca abandoné a Liam, fui a su hotel tres veces ese día y me fui 40 minutos antes de que esto sucediera».
«Cuando me fui, había más de 15 personas en el vestíbulo del hotel charlando y bromeando con él. Nunca me imaginé que algo así sucedería».
Agregó: «Yo no era el mánager de Liam. Él era solo mi muy querido amigo».
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