Pureza, dedicación, veneración, pero principalmente devoción por la Chiquinquirá, son solo algunas de las cualidades que poseen estas servidoras
Foto: Alfredo Chinaleong
Maracaibo – Nueve meses de preparación se necesitan para poder formar parte de la cofradía Hijas de María. Nueve meses donde la devoción y el amor por nuestra Virgen Morena es el principal motivo de todas esas niñas y jóvenes, que desde los 0 años y mientras se mantengan puras, dedican años de sus vidas a servirle a la Chinita y lo que las lleva a convertirse en una autentica hija de María.
Ya son más de 100 años desde que se fundó esta cofradía y año tras año se siguen sumando fieles feligreses a esta congregación que le brinda una mano amiga al necesitado, que va evangelizando por donde va, que adora a la China y que no duda en dedicar su vida a servirle a la virgencita. Cada 18 de enero inicia el camino para ser parte de la cofradía.
Vestimenta
Sus vestidos blancos, sus mantillas y su medalla de la Virgen son la simbolización de su bondad, atrás quedan esos nueve meses donde vestían pantalón negro y camisa blanca, al llegar el 1º de octubre pasan a ser una hermandad que se reúne sábado a sábado para orientar a las más pequeñas y a las no tanto, a servir al prójimo, a amar incondicionalmente a todo aquello que viva. La importancia de los valores y la enseñanza de la doctrina católica.
Las servidoras deben permanecer puras para su servicio
Vigilia
Las fiestas patronales son motivo de alegría para estas mujeres de fe que durante esta celebración hacen guardia frente a la tablita y se arrodillan para agradecer y rezar por un mundo más humanitario donde no haya discriminación, ni odio y reine el amor por nuestros hermanos y el fervor por nuestra Patrona.
Asimismo, colaboran de manera desinteresada en las muchas actividades realizadas para celebrar un año más de la aparición de la Virgen, todo esto se lleva a cabo por el amor que sienten a la Chinita, pues no existe un programa que deban cumplir al pie de la letra en esta época.
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