Por: Iraida Villasmil
En medio de esta campaña de rescate por las regionales, se han llevado a cabo actividades, asambleas, encuentros y varios actos. Pero para mí uno de los más emotivos ha sido el que realizara recientemente, el movimiento Zulia Humana.
Este movimiento que agrupa una cantidad de compañeros que fueron parte de esa mayoría abrumadora que una vez creyó y militó en los ideales que inspiró Hugo Chávez a su llamada «Revolución».
Estos compañeros, como los Legisladores Labrador, Vielma y Fernández, junto con Rodrigo Cabezas, hicieron presencia en ese acto de respaldo público a la urgencia del rescate del Zulia y del cambio en el timón de mando, apoyando así las candidaturas de Manuel Rosales Guerrero y Rafael Ramirez Colina este 21 de Noviembre.
El acto estuvo cargado de emotivas manifestaciones de respeto y cariño de unos con otros, en clara manifestación que tenemos todos de reencontrarnos como sociedad y más aún, ante la urgencia del rescate de nuestra democracia y vida institucional.
El magistral discurso pronunciado por Rodrigo, constituyó el centro de este encuentro y el cual me permitiré ante ustedes reproducir en algunos párrafos que nos robó aplausos y causó momentos de verdadera emoción y fuerza política.
Es decir; se rompió el dique que impedía esta reunión politica, como también lo manifestara en su respuesta calurosa a los anfitriones del acto, Manuel Rosales: «Se abren hoy nuestros brazos para así reencontrarnos como venezolanos TODOS que somos. Por eso estoy aquí para decirles nuevamente con brazos abiertos, aquí nos necesitamos todos».
Ya lo describía en sus magníficas palabras, Rodrigo Cabezas y me voy a permitir citar algunos praragrafos desu magistral discurso :
«Estamos urgidos de un nuevo gobierno regional liderizado por Manuel Rosales y nuevas alcaldías para iniciar la reconstrucción de lo destruido, para sembrar de nuevo donde se halla marchitado la esperanza.
Hoy podemos decir, de nuevo desde nuestras conciencias y principios, y con sentido de la dimensión histórica, que aquello naufragó, la mal llamada REVOLUCIÓN BOLIVARIANA que terminó en un descomunal fraude. Una estafa al pueblo humilde que la acompañó como mayoría social».
«Los que la representan se deslizaron hacia un estado de corrupción generalizada, nuevos prepotentes ricos, extorsionadores de oficio , ‘jeques’ multimillonarios exitosos en asaltar el tesoro de la nación como botín de guerra; pérdida absoluta frente a la vergüenza humana…. Élite política engreída en el supuesto que pueden tener a una nación como rehén y humillada su alma nacional…»
«Es imposible seguir acompañando estos tiempos oprobiosos».
«A la Revolución Bolivariana llegamos como militantes de la izquierda y como militantes de la izquierda partimos…»
Además Cabezas enfatizó: «Es falso de toda falsedad que el dilema político venezolano sea entre la derecha y la izquierda, entre el G4 y el PSUV».
«La batalla histórica planteada es entre una gran Nación, VENEZUELA, y la élite política corrompida y violadora de DDHH….»
Termino Rodrigo citando a una poeta nicaragüense, Gioconda Belli con su poema Huelga :
«Quiero una huelga grande…
una huelga de ojos,manos y besos
una huelga donde respirar no sea permitido,
Una huelga donde nazca el silencio
para oír los pasos
del tirano que se marcha…»
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