León XIV tendrá que atender ante la posible bendición a parejas homosexuales
Robert Prevost, ahora conocido como Leon XIV, fue elegido como el nuevo Papa el día 8 de mayo de 2025, tras dos días y cuatro votaciones del cónclave.
Ahora la gente se pregunta cuales serán los retos que deberá enfrentar.
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Iglesia dividida
Aunque los cardenales no lo quieran admitir, en estos doce años de pontificado se ha visto a una iglesia dividida en dos partes, una más moderada y la otra más conservadora, muy crítica con las nuevas doctrinas del Papa Francisco.
Tratar de unir las diferentes posiciones será estratégico, así como continuar por la senda de la «sinodalidad», la de construir una iglesia donde todos tengan voz, pese a que a muchos no les guste.
Finanzas del Vaticano
Este fue uno los temas más abordados en las congregaciones de cardenales previas al cónclave.
Entre las revoluciones realizadas por el Papa Francisco, se encuentra las finanzas del Vaticano, con un trabajo de transparencia sobre todo en el IOR (banco del Vaticano), pero el nuevo pontífice deberá abordar el problema de las arcas vacías, con una auténtica revisión del gasto, ya que las donaciones a la Iglesia han disminuido considerablemente.
Abuso sexual en la iglesia
Pese a que el Papa Francisco dejó normas para combatir contra los abusos sexuales en la iglesia, queda bastante por hacer, siendo que asociaciones de víctimas solicitan la aplicación de estas leyes en la diócesis, mayor transparencia en la gestión vaticana y en los procesos, pero sobre todo, juicios e investigaciones más rápidas.
Mayor participación de las mujeres
Francisco se cerró casi categóricamente la opción del sacerdocio de las mujeres, pero también la posibilidad del diaconado femenino, algunas labores de las que ya se ocupan por ejemplo los laicos hombres, siendo esto visto como una forma de bloquear una participación mayor de las mujeres en la vida de la iglesia.
El posible diaconado femenino, junto a una mayor presencia de las mujeres en puestos de poder, es otro de los desafíos para León XIV, debido a que muchos colectivos de católicas no se rendirán en sus peticiones.
Algo que a muchos jerarcas de la iglesia no les gustó, fue el nombramiento de Simona Brambilla en enero de 2025 como prefecta o ‘ministra’ del dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, del que depende todas las órdenes religiosas, en vez de a un cardenal como era hasta entonces.
Bendición a parejas homosexuales
El documento Fiducia Supplicans, publicado por la Congregación para la Doctrina de Fe, explicaba que se podía bendecir a parejas consideradas «irregulares» por la iglesia, incluidas aquellas del mismo sexo, como era de esperar esto causo bastante división en el seno de la iglesia católica.
La iglesia africana se mostró contraria al unísono a este documento, y pidió explicaciones al Papa Francisco, pero con el fallecimiento de este último, ahora el nuevo pontífice deberá responder a los obispos de uno de los continentes donde el catolicismo sigue creciendo.
Situación de China y Estados Unidos
A nivel diplomático, el acuerdo que durante el pontificado de Jorge Bergoglio se firmó con China para concordar el nombramiento de los obispos y se ha ido renovando fue considerado como un hito para el acercamiento entre ambos países que no tienen relaciones diplomáticas y para salvaguardar a los católicos.
Hay bastantes en la iglesia católica que no aceptan que Pekín tenga voz en la elección de un obispo y sobre todo la administración estadounidense, que también en su momento elevó sus criticas al diálogo con China.
La relación con Estados Unidos y con su actual presidente, Donald Trump, será otro de los retos diplomáticos que abordar, pues Francisco y su secretario de Estado, Pietro Parolin, dejaron claro su distancia en cuestiones como las políticas antimigrantes y los recortes a la cooperación internacional.
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