Miranda — Tras la protesta activa que llevó a cabo el gremio cárnico del municipio Miranda hace un mes aproximadamente, y de la reunión efectuada entre productores y comerciantes, de la cual no surgió ningún acuerdo con las fuerzas vivas de la localidad, los carniceros han decidido surtir sus establecimientos «a todo riesgo».
Temen que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) les decomise el rubro. «Hasta ahora no hemos llegado a ningún acuerdo con las autoridades. Ellos quieren que vendamos el kilo de carne a 280 bolívares, cuando se lo estamos comprando al productor en 250 bolívares», expresó uno de los afectados, quien prefirió no identificarse. Además «estamos pidiendo que nos vendan la carne a precio regulado para poder vender al precio que establece la ley, y que ambas partes ganemos». Cabe resaltar que los carniceros habían decidido no surtir sus establecimientos como medida de protesta.
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