Foto: Agencias
El softbol con un solo hombre se metió en las entrañas de la inmortalidad. Ramón Jones, nacido en Cabimas, se convirtió en el súper hombre del softbol al lanzar dos partidos sin hit ni carreras en los Juegos Centroamericanos y del Caribe que se celebran en México. Dicho así suena a mucho, pero resulta que es mayor su espectacular actuación durante el año 2014, pues con anterioridad había lanzado uno en Argentina en las eliminatorias y otro más en el torneo de la Liga Nacional Venezolano con Sureños (además de convertirse en el primer lanzador que lanza dos no hitter en un Mundial de Softbol, hazaña conseguida en el 2013).
Para quienes estamos metidos en el softbol, atrás quedarán todos los lanzadores zulianos a quienes ensalzamos una y otra vez. Édralo Montiel, Tito Bracho, Helímenas Romero, David Romero, Arialdo Bracho, Rosendo Bracho, Elio Ramírez (El Chofer), Humberto Rivera (Tamba). La lista es larga, todos ellos quedaron atrás, muy lejos, luego de lo que este monstruo del pitcheo ha realizado a lo largo del año.
La satisfacción para nosotros se basa en que le vimos falta de madurez cuando lo conocimos. La primera vez lo vi en el estadio David Romero (antes Miraflores) de Cabimas. Entonces se presentaba a los partidos con una serpiente tragavenados que llaman, se paseaba por las tribunas. Nunca pudimos entender el porqué de esa conducta, solo atinamos a señalar que el único enemigo que veíamos en su desarrollo era esa manifiesta inmadurez de la que hacía gana.
Pienso que el único que creía en él en esos momentos era el desaparecido Énder Chaparro, quien se convirtió en su tutor y amigo. Su sacrificio no fue en vano aunque le vimos darle un guantazo a una pelota bateada a sus manos que de no haber sido atrapada en su rebote por el defensor de la primera base, el corredor que estaba en tercera significaba la derrota para su equipo Sureños. En otra oportunidad, en La Concepción lo vi desafiar a su amigo Rafito Flores, receptor de la selección.
¿Quién lo hizo cambiar además de Énder Chaparro? ¿Cómo se produjo ese cambio de timón? A su lado se apareció una mujer, Helen Oquendo Quero, quien lo inspiró y esa inspiración creció con fuerza cuando se anunció que el primer hijo estaba en camino. A partir de allí todo ha comenzado a ser seriedad y a escalar posiciones hacia el estrellato.
Ramón Jones se encontró consigo mismo y allí están los resultados a la vista.
El paquete es ahora para el Irdez que se adelantó a los acontecimientos y dio el premio Luis Lucho Moreno por adelantado a un muchacho que había lanzado un partido igual en los juegos nacionales. Dijimos qué sucedería en el futuro si se aparecía alguien por allí con una hazaña mayor. Eso fue exactamente lo que sucedió, Ramón Jones los hizo quedar mal, muy mal.
No hay premio que no se gane este año y habrá que crear otro, como Atleta del Siglo, única manera de reivindicar el premio que otorga el Irdez.
El softbol parió un monstruo que se metió en todas las historias, la del Zulia, la de Venezuela y la del mundo, ¿les parece poco?
Al final llego a la conclusión de que en todos estos cambios de personalidad de Ramón Jones tiene mucho que ver doña Gloria Quero, una educadora quien por su hija supo manejar las cosas, de ello no me cabe la menor duda.
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