Lo peor es que no se sabe que es mejor; que estèn llenos o vacios, pues al bajar el agua quedan al descubierto los cráteres de la carretera y el fango que ha hecho a más de uno
Foto: Alfredo Chinaleong
Maracaibo — Para muchos transeúntes y conductores, entrar o salir del centro de la ciudad es un verdadero dolor de cabeza, sobre todo si deben accesar a este por el final de la avenida Delicias o el principio de la Avenida Los Haticos.
El suplicio se debe a que le dan la bienvenida o despedida, dos sendos charcos que tienen tanto tiempo, que pareciera que son parte íntegra del ornato del lugar .
Uno de ellos, el del inicio de Los haticos, causò fuertes protestas a finales del año pasado que paralizó los comercios cercanos y obligò a los pasajeros a salir a pie del centro, la solución que encontraron, fue el achique y limpieza del área que solo fue efectiva una semana, hasta que cayeron dos gotitas de agua y se volviò a llenar.
Lo peor es que no se sabe que es mejor; que estèn llenos o vacios, pues al bajar el agua quedan al descubierto los cráteres de la carretera y el fango que ha hecho a más de uno, caer de platanazo y llenarse la ropa de porquerìa.
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