Al mismo tiempo indicó que trabajan para construir un clima de confianza en el pueblo para evitar más episodios de violencia
Foto: Agencias
Caracas – El arzobispo de Buenos Aires y enviado del papa, Claudio Celli, dijo a La Nación que Venezuela podría seguir un camino de sangre si fracasa el diálogo entre el gobierno y la oposición
El nuncio apostólico de Venezuela, Aldo Giordano, dijo este domingo 6 de noviembre que las mesas temáticas del diálogo entre el gobierno y la oposición se están reuniendo para buscar un acuerdo fructífero que termine con la crisis política, económica y social de Venezuela.
Al mismo tiempo indicó que trabajan para construir un clima de confianza en el pueblo para evitar más episodios de violencia.
Así lo dijo luego de una misa oficiada en la iglesia La Candelaria en Caracas para pedir a Dios por la pronta beatificación del doctor José Gregorio Hernández.
«Estamos trabajando ustedes conocen como el papa mismo está pendiente de este proceso. Creo en la reconciliación, creo en el diálogo, siempre es posible una reconciliación y con todos los límites que conocemos, con todas las preguntas que el pueblo tiene. Vamos a continuar este camino, intentamos de construir esta confianza en el pueblo para evitar violencia para el bien común», dijo el monseñor Giordano.
Sobre si es posible ver resultados tangibles del encuentro entre los bandos políticos el próximo 11 de noviembre, Giordano mantiene la «esperanza» de que así sea.
«Las mesas temáticas se están encontrando en estos días. No es un camino fácil, todo necesita valentía, valor siempre. Creo que muchos, la mayoría del pueblo de Venezuela quiere que intentamos este camino», declaró a Globovisión.
Este sábado, el arzobispo de Buenos Aires y enviado del papa, Claudio Celli, dijo al diario argentino La Nación que Venezuela podría seguir un camino de sangre si fracasa el diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición.
En medio de la crítica situación económica y social que atraviesa el país, el arzobispo señaló que encontró la nación en una situación «muy difícil».
«No es el papa sino el pueblo venezolano el que va a perder, porque el camino podría verdaderamente ser el de la sangre. Y hay gente que no tiene miedo de que haya derramamiento de sangre. Esto es lo que me preocupa», declaró.
«La situación está muy fea (…) No hay comida, no hay medicinas», añadió. De acuerdo con Celli, el papa corre un riesgo muy grande al intentar encauzar el diálogo roto entre el presidente Maduro y la oposición.
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