Tecnología: motor de transformación

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26 de enero, 2016 - 1:41 pm
Redacción Diario Qué Pasa

 

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Foto: Agencias

Algunas tecnologías tienen el potencial de afectar el status quo, la manera de vivir y trabajar, reorganizar cadenas de valor y conducir completamente a nuevos productos y servicios

Vivimos una época donde las organizaciones, independientemente de su tamaño, tienen que cambiar sus modelos de negocio y la forma en que atienden los mercados, utilizando herramientas tecnológicas disponibles.

Los avances tecnológicos han modificado el futuro de las sociedades y en el segundo capítulo de la Ponencia IMEF 2015, titulado “Tecnología: motor de transformación” se plantea que la tecnología no existiría sin la necesidad constante de los seres humanos de innovar y crear nuevas formas para mejorar la vida diaria.

Pero, ¿cuándo nos hicimos tan dependientes de ella, o siempre lo hemos sido?

Desde de la Revolución Industrial (finales del Siglo XVIII y principios del XIX) a la fecha, la tecnología ha tenido un papel único para potenciar el crecimiento y transformar las economías; su principal objetivo: reunir herramientas que puedan facilitar la creación, uso e intercambio de conocimiento, así como ayudar a ejecutar y resolver los problemas de la humanidad. Algunas de los grandes avances tecnológicos son la máquina a vapor (1700), el teléfono (1876), la lámpara incandescente (1879), el automóvil (1889), la televisión (1927), la penicilina (1928), el lanzamiento del satélite Sputnik (1957), Internet (década de 1960) y la computadora personal (1970).

Algunas tecnologías tienen el potencial de afectar el status quo, la manera de vivir y trabajar, reorganizar cadenas de valor y conducir completamente a nuevos productos y servicios. Internet lo hizo, pero ya no solo las personas están conectadas a la red, también las cosas y, entonces, surge el internet de las cosas (IoT), referente al uso de sensores, impulsores y comunicaciones de datos integrados en objetos físicos.

Todo ello nos dice que la tecnología sigue su curso y ahora se lleva puesta (wearables), revolucionando así el uso de las computadoras; tan solo en 2014, 78% de la población de Norteamérica la usaba. Hoy, el mercado se ha incrementado debido a la popularidad de dispositivos de entretenimiento, el aumento en el uso de lentes inteligentes y la inclinación creciente hacia la investigación y desarrollo.

En ese afán se siguen sumando innovaciones y cuatro tecnologías están impulsando este efecto en los negocios: computación social, móvil, analítica y de nube (SMAC), creando un ecosistema que le permite a una empresa mejorar operaciones y acercarse al cliente con gastos mínimos y un máximo alcance.

La proliferación de datos estructurados y no estructurados, creados por los dispositivos móviles, sensores, medios sociales, los programas de tarjetas de fidelidad y navegación en sitios web está creando nuevos modelos de negocio construidos a partir de datos generados por los clientes. Ninguna de las cuatro tecnologías puede ser una ocurrencia de último momento, porque es la sinergia creada por el trabajo conjunto de los elementos referidos, lo que crea una ventaja competitiva.

Conocer este ecosistema implica un serio acercamiento a nuevas conceptos y formas de hacer negocio, por ello en la Ponencia IMEF 2015 se explica detalladamente por qué la tecnología es motor de la transformación y para mayor detalle, puede consultarse el documento en www.imef.org.mx

 

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