Maracaibo — Lágrimas, dolor, impotencia y rabia fueron los protagonistas durante el velorio de Segundo Adolfo Holmarza (51), el hombre que fue asesinado el pasado jueves dentro de una farmacia en la Curva de Molina, luego de ser perseguido por un delincuente que lo «cazó» cuando retiró Bs. 16 mil de una entidad financiera en la avenida La Limpia.
La esposa del hombre, Mercedes Villalobos, relató en medio del dolor de perder a su compañero, algunos detalles del crimen que paralizó por más de tres horas el sector comercial. «Una policía dijo que ella no era ambulancia para auxiliar a mi esposo, lo dejaron morir, no lo auxiliaron», aseveró la mujer.
«Él salió a las 6:00 de la mañana a cobrar el cheque que le habían dado por las utilidades, era primera vez que lo atracaban, la noche del miércoles me dijo que le habían pagado y que iba a cobrar para comprar algunas cosas en la casa», comentó Villalobos.
Holmarza tenía siete meses laborando en una confitería en El Marite. Dejó un hijo en orfandad y residía desde hace 14 años en el barrio Guaicaipuro, lugar donde fue velado. Vecinos lo describieron como un buen hombre, trabajador y buen vecino. A la 1:00 de la tarde de ayer fue la sepultura en el cementerio El Edén.
El dinero que intentó robarle el delincuente a Adolfo Holmarza, no aparece. La familia desconoce el paradero del paquete, sin embargo, buhoneros del lugar afirmaron que los trabajadores de la farmacia «se lo repartieron cuando bajaron la santamaría».
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Fotos: Ana Moreno
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