Versiones diferentes se manejan en este cruel asesinato
Foto: Greily Nuñez
Maracaibo- « El estaba conmigo como alas 7:30 de la noche, me dijo que iría para la avenida y de ahí no supe mas nada de él» comentó uno de las últimas personas que vieron a Rafael Roque Romero Marín, de 35 años.
El fatídico hecho, se registró en la avenida 136 del barrio Merí Sanchez de Ugaz, parroquia Antonio Borjas Romero, aproximadamente a las 4:00 de la mañana de hoy, cerca del lugar donde residía el fallecido
Moradores de la zona, encontraron el cadáver tirado en una trilla cerca del sector, presentando golpes en todo su cuerpo. Así mismo susurraban entre sí, que el cuerpo del hombre, sería tirado por varias personas a píe, puesto que en el lugar no se escucharon vehículos de ningún tipo. Así mismo afirmaron, que esa zona, se presta para cometer múltiples delitos, por lo que prefieren encerrarse temprano para evadir a los malhechores de la barriada.
Fuentes policiales afirmaron, que el occiso tenía un orificio grande en la parte de atrás de su cabeza, por lo que presumen sería un tiro de escopeta, sin embargo, sería el personal forense quienes determinarían el brutal asesinato.
Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC), se apersonaron hasta el lugar para recoger el cuerpo de Romero y trasladarlo a la morgue de LUZ.
Familiares consternados
En medio del cuerpo tirado, arropado con una sábana blanca, se encontraba uno de sus hermanos, quien no quiso identificarse. Afligido por el terrible suceso, comentó, que su hermano se desempeñaba como vigilante de la residencia La Lagunita. afirmaron que su consanguíneo lo habrían asesinado para despojarlo de sus pertenencias. Residía con una prima, ya que se había dejado de su esposa hace algún tiempo.
Deudos exigieron a las autoridades competentes, que la muerte de su parentesco no quede en vano.
El perecido dejó dos niños en orfandad.
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